Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt
- Piblisite -





Hechos 27:3 - Biblia Castilian 2003

3 Al d a siguiente tocamos tierra en Sidón; Julio se portó amablemente con Pablo y le permitió visitar a sus amigos y recibir sus atenciones.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

3 Al otro día llegamos a Sidón; y Julio, tratando humanamente a Pablo, le permitió que fuese a los amigos, para ser atendido por ellos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

3 Al día siguiente, cuando atracamos en Sidón, Julio fue muy amable con Pablo y le permitió desembarcar para visitar a sus amigos, a fin de que ellos pudieran proveer a sus necesidades.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

3 Llegamos a Sidón al día siguiente. Julio se mostró muy humano con Pablo y le permitió visitar a sus amigos y que pudieran atenderle.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

3 Al día° siguiente atracamos en Sidón, y Julio, tratando a Pablo con benevolencia, le permitió que fuera a sus amigos a recibir atención.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 Al día siguiente tocamos tierra en Sidón; Julio se portó amablemente con Pablo y le permitió visitar a sus amigos y recibir sus atenciones.

Gade chapit la Kopi




Hechos 27:3
12 Referans Kwoze  

Canaán engendró a Sidón, su primogénito, y a Het,


Zabulón habitará a orillas del mar, junto a la ribera de las naves; en Sidón apoyará su flanco.


Dijo: no volverás ya a alegrarte, virgen deshonrada, hija de Sidón. Levántate, pasa a Quit n, que ni aun all tendrás reposo.


También Jamat, que linda con ella, y Sidón, tenida por sabia.


'¡Ay de ti, Coraza n! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque, si en Tiro y en Sidón se hubieran realizado los mismos milagros que en vosotras, ya hace tiempo que, cubiertas de cilicio y en ceniza, se habr an convertido.


Estaba muy irritado contra los tirios y los sidonios. Éstos, de común acuerdo, se presentaron ante él. Y habiéndose ganado a un tal Blasto, maestro de cámara del rey, solicitaban la paz, dado que su región depend a económicamente de la casa real.


Y ordenó al centurión que Pablo siguiera bajo custodia, pero que disfrutara de cierta libertad y que no se impidiera a ninguno de los suyos prestarle servicios.


Cuando se decidió que nos embarcáramos para Italia, pusieron a Pablo y a otros cuantos presos bajo la custodia de un centurión, por nombre Julio, de la cohorte Augusta.


Pero el centurión, deseando salvar a Pablo, impidió su propósito y ordenó a los que sab an nadar que se tiraran los primeros y salieran a tierra;


Cuando entramos en Roma, se le permitió a Pablo vivir en una casa particular, con el soldado que lo custodiaba.


por la izquierda, y a Ebrón, Rejob, Jamón y Caná, hasta Sidón la Grande.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite