Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Hechos 15:22 - Biblia Castilian 2003

22 Les pareció bien a los apóstoles y a los ancianos, con toda la iglesia, elegir entre ellos, para enviar a Antioqu a con Pablo y Bernabé, a Judas, llamado Barsabás, y a Silas, hombres principales entre los hermanos,

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

22 Entonces pareció bien a los apóstoles y a los ancianos, con toda la iglesia, elegir de entre ellos varones y enviarlos a Antioquía con Pablo y Bernabé: a Judas que tenía por sobrenombre Barsabás, y a Silas, varones principales entre los hermanos;

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

22 Entonces los apóstoles y los ancianos, junto con toda la iglesia de Jerusalén, escogieron delegados y los enviaron a Antioquía de Siria con Pablo y Bernabé para que informaran acerca de esta decisión. Los delegados escogidos eran dos de los líderes de la iglesia: Judas (también llamado Barsabás) y Silas.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

22 Entonces los apóstoles y los presbíteros, de acuerdo con toda la Iglesia, decidieron elegir algunos hombres de entre ellos para enviarlos a Antioquía con Pablo y Bernabé. Fueron elegidos Judas, llamado Barsabás, y Silas, ambos dirigentes entre los hermanos.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

22 Entonces pareció bien a los apóstoles y a los ancianos, con toda la iglesia, enviar de entre ellos varones escogidos° a Antioquía con Pablo y Bernabé: a Judas, el que se llamaba Barsabás, y a Silas, varones prominentes entre los hermanos;

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

22 Les pareció bien a los apóstoles y a los ancianos, con toda la iglesia, elegir entre ellos, para enviar a Antioquía con Pablo y Bernabé, a Judas, llamado Barsabás, y a Silas, hombres principales entre los hermanos,

Gade chapit la Kopi




Hechos 15:22
29 Referans Kwoze  

Lo oyó todo el pueblo y le complació, pues cuanto hac a David les parec a bien a todos.


También en Judá se dejó sentir la mano de Dios, que les dio unanimidad de corazón para cumplir la orden del rey y de los jefes, conforme a la palabra de Yahveh.


Esto pareció lo más razonable a los ojos del rey y a toda la asamblea.


Presentaron a dos: a José, de apellido Barsabás, por sobrenombre Justo, y a Mat as.


Entre tanto, los que se hab an dispersado a partir de la persecución que sobrevino cuando lo de Esteban hab an llegado hasta Fenicia y Chipre y Antioqu a, aunque sólo predicaban la palabra a los jud os.


Hab a, con todo, entre ellos algunos de Chipre y de Cirene que, al llegar a Antioqu a, comenzaron a hablar también a los griegos, anunciándoles el evangelio del Se or Jesús.


Llegó esta noticia a o dos de la Iglesia de Jerusalén y enviaron a Antioqu a a Bernabé,


Por aquellos mismos d as llegaron a Antioqu a algunos profetas de Jerusalén.


que llevar an en mano el siguiente escrito: 'Los apóstoles y los hermanos ancianos, a los hermanos de Antioqu a, Siria y Cilicia, provenientes de la gentilidad: salud.


Por ello, nos ha parecido bien elegir, de común acuerdo, algunos hombres y enviarlos a vosotros, juntamente con nuestros queridos Bernabé y Pablo,


Os enviamos, pues, a Judas y a Silas, que os explicarán de viva voz lo siguiente:


Ellos, pues, provistos por la iglesia de lo necesario para el viaje, atravesaron Fenicia y Samar a, refiriendo la conversión de los gentiles y proporcionando una gran alegr a a todos los hermanos.


Tras la despedida, llegaron a Antioqu a y, reunida la comunidad, les entregaron la carta.


Por su parte, Judas y Silas, que también eran profetas, exhortaron y confirmaron a los hermanos con un largo discurso.


Pablo, por su parte, eligió por compa ero a Silas, partió, encomendado por los hermanos a la gracia de Dios,


Al ver sus amos desvanecida la esperanza de sus ganancias, prendieron a Pablo y a Silas, los arrastraron al foro ante los magistrados


Alrededor de la media noche Pablo y Silas, puestos en oración, cantaban himnos a Dios; los restantes presos les estaban escuchando.


Pidió él una luz, saltó dentro, se arrojó temblando a los pies de Pablo y Silas,


En seguida, los hermanos, por la noche, despidieron a Pablo y a Silas hacia Berea. Ellos, apenas llegaron, se fueron derechos a la sinagoga de los jud os.


Entonces, los hermanos despidieron a toda prisa a Pablo para que marchara hacia la costa. Silas y Timoteo, mientras tanto, se quedaron all.


Algunos de entre ellos quedaron convencidos y se unieron a Pablo y a Silas, as como una gran muchedumbre de prosélitos griegos y no pocas mujeres principales.


Cuando llegaron de Macedonia Silas y Timoteo, Pablo se consagró de lleno a la predicación, testificando a los jud os que Jesús era el Cristo.


Enterados los apóstoles en Jerusalén de que hab a recibido Samar a la palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan,


Porque el Hijo de Dios, Cristo Jesús, que nosotros, Silvano, Timoteo y yo, proclamamos entre vosotros, no fue s y no, sino que en él se realizó el s.


Pablo, Silvano y Timoteo a la iglesia de los tesalonicenses, fundada en Dios Padre y en el Se or Jesucristo: gracia y paz a vosotros.


Pablo, Silvano y Timoteo, a la iglesia de los tesalonicenses, fundada en Dios, nuestro Padre, y en el Se or Jesucristo:


Os he escrito esta breve carta por medio de Silvano, a quien considero vuestro fiel hermano, para animaros y para testificar que ésta es la verdadera gracia de Dios. Manteneos firmes en ella.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite