Génesis 19:35 - Biblia Castilian 2003

³⁵ Dieron de beber vino a su padre también aquella noche, y la peque a fue y se acostó con él; pero él no la sintió ni cuando ella se acostó, ni cuando se levantó.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³⁵ Y dieron a beber vino a su padre también aquella noche, y se levantó la menor, y durmió con él; pero él no echó de ver cuándo se acostó ella, ni cuándo se levantó.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁵ Así que aquella noche ellas volvieron a emborracharlo con vino, y la hija menor entró y tuvo relaciones sexuales con él. Igual que antes, él no se dio cuenta cuando ella se acostó ni cuando se levantó.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁵ Le hicieron beber y lo embriagaron de nuevo aquella noche, y la hija menor se acostó con él. El padre no se dio cuenta de nada, ni cuando ella se acostó ni cuando se levantó.

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁵ Y también hicieron beber vino a su padre aquella noche, y se levantó la más joven y se acostó con él, sin embargo él no supo cuándo ella se acostó, ni cuándo se levantó.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁵ Dieron de beber vino a su padre también aquella noche, y la pequeña fue y se acostó con él; pero él no la sintió ni cuando ella se acostó, ni cuando se levantó.

Génesis 19:35 Referans Kwoze

Génesis 19:34

Al d a siguiente dijo la mayor a la peque a: 'Anoche me acosté yo con mi padre; démosle de beber vino también esta noche, acércate y acuéstate con él, y obtendremos posteridad por nuestro padre'.

Génesis 19:36

Las dos hijas de Lot concibieron de su padre.

Salmos 8:4

Cuando miro los cielos hechura de tus manos, la luna y las estrellas que tú has establecido

Proverbios 24:16

pues siete veces cae el justo y se levanta, mientras los malvados sucumben a la miseria.

Eclesiastés 7:26

Y descubro que más amarga que la muerte es la mujer, porque es una trampa; su corazón, una red; sus brazos, cadenas. El que es grato a Dios logra escapar; pero el pecador queda prisionero de ella.

Lucas 21:34

Tened cuidado de vosotros mismos, no sea que vuestro corazón se embote por la crápula, la embriaguez y las preocupaciones de la vida, y caiga de improviso sobre vosotros aquel d a

1 Pedro 4:7

El final de todo está cerca. Sed, pues, sensatos y velad en la oración.