Efesios 3:17 - Biblia Castilian 2003

¹⁷ para que Cristo habite, mediante la fe, en vuestro corazón y para que, arraigados y cimentados en el amor,

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁷ para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor,

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁷ Entonces Cristo habitará en el corazón de ustedes a medida que confíen en él. Echarán raíces profundas en el amor de Dios, y ellas los mantendrán fuertes.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁷ Que Cristo habite en sus corazones por la fe, que estén arraigados en el amor y en él puedan edificarse.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁷ para que habite el Mesías por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁷ para que Cristo habite, mediante la fe, en vuestro corazón y para que, arraigados y cimentados en el amor,

Efesios 3:17 Referans Kwoze

Isaías 57:15

Que as dice el Excelso, el Sublime, que reside en la eternidad y cuyo nombre es santo: 'En lo alto y en lo santo resido, y con el quebrantado y humilde de esp ritu, para vivificar el esp ritu de los humildes, para vivificar el corazón de los quebrantados.

Mateo 13:6

pero en cuanto salió el sol se agostó y, como no hab a echado ra ces, se secó.

Lucas 6:48

Se parece a un hombre que, al ponerse a construir una casa, cavó y ahondó y puso los cimientos sobre la roca; cuando llegó la crecida, el torrente se precipitó contra aquella casa, pero no pudo derribarla, por estar bien construida.

Juan 14:17

el Esp ritu de la verdad a quien el mundo no puede recibir, porque no lo ve ni lo conoce. Vosotros lo conocéis, porque con vosotros permanece y en vosotros estará.'

Juan 14:23

Jesús le contestó: 'Si uno me ama, guardará mi palabra, mi Padre lo amará y vendremos a él para fijar morada en él.

Juan 17:23

Yo en ellos y tú en m, para que lleguen a ser consumados en uno, y as el mundo conozca que tú me has enviado y que los has amado como tú me has amado a m.'

Juan 6:56

El que come mi carne y bebe mi sangre, en m permanece, y yo en él.

Romanos 5:5

y la esperanza no decepciona, porque se ha derramado en nuestros corazones el amor de Dios por medio del Esp ritu Santo que nos ha sido dado.

1 Corintios 3:6

Yo planté, Apolo regó; pero el crecimiento lo produjo Dios.

1 Corintios 8:1

Todos tenemos conocimiento acerca de la carne inmolada a los dolos. Pero el conocimiento infla, mientras que el amor construye.

2 Corintios 13:5

Examinaos vosotros mismos a ver si os mantenéis en la fe; poneos a prueba. ¿O acaso no os dais cuenta de que Jesucristo está entre vosotros? ¡A no ser que estéis desaprobados!

2 Corintios 6:16

¿Qué compatibilidad entre el templo de Dios y los dolos? Porque nosotros somos templo de Dios vivo, como lo dijo Dios: Habitaré y caminaré en medio de ellos; yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo.

Gálatas 2:20

Y ya no vivo yo; es Cristo quien vive en m. Y respecto del vivir ahora en carne, vivo en la fe del Hijo de Dios, que me amó y se entregó a s mismo por m.

Gálatas 5:6

Porque en Cristo Jesús nada valen ni la circuncisión ni la no circuncisión, sino la fe que actúa por medio del amor.

Colosenses 1:23

si es que permanecéis bien cimentados y firmes en la fe, y sin dejaros apartar de la esperanza del evangelio que habéis o do y ha sido proclamado a toda criatura bajo el cielo, y al cual yo, Pablo, he sido destinado como servidor.

Colosenses 1:27

al que Dios ha querido dar a conocer cuál es la riqueza de la gloria de este misterio entre los gentiles, que es Cristo entre vosotros, la esperanza de la gloria.

Colosenses 2:7

arraigados y sobreedificados en él y asidos a la fe, según se os ense ó, prodigando la acción de gracias.

1 Juan 4:16

Y nosotros hemos llegado a conocer y a creer en el amor que Dios tiene por nosotros. Dios es amor: y quien permanece en el amor, permanece en Dios, y Dios en él.

1 Juan 4:4

Vosotros, hijitos, sois de Dios y los habéis vencido. Porque es mayor el que está en vosotros que el que está en el mundo.

Apocalipsis 3:20

Mira que estoy a la puerta y llamo. Si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré en su casa y cenaré con él, y él conmigo.