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Efesios 1:5 - Biblia Castilian 2003

5 nos hab a predestinado a ser hijos adoptivos suyos por medio de Jesucristo, según el beneplácito de su voluntad,

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

5 en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad,

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Biblia Nueva Traducción Viviente

5 Dios decidió de antemano adoptarnos como miembros de su familia al acercarnos a sí mismo por medio de Jesucristo. Eso es precisamente lo que él quería hacer, y le dio gran gusto hacerlo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

5 nos destinó de antemano para ser hijos suyos en Jesucristo y por medio de él. Así lo quiso y le pareció bien

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La Biblia Textual 3a Edicion

5 habiéndonos predestinado en amor para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesús el Mesías, según la complacencia de su voluntad,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

5 nos había predestinado a ser hijos adoptivos suyos por medio de Jesucristo, según el beneplácito de su voluntad,

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Efesios 1:5
32 Referans Kwoze  

Yo hab a pensado: Te pondré entre los hijos y te daré un pa s delicioso, la herencia más preciosa de las naciones. Y me dec a: me llamarás 'Padre m o', y de mi seguimiento no te apartarás.


¿No acabas de implorarme ahora mismo: ¡Padre m o! El amigo de mi juventud eres tú?


Hasta el momento en que dio a luz un hijo no tuvo relaciones con ella. Y él le puso el nombre de Jesús.


S, Padre; as lo has querido tú.


En aquel momento, Jesús se estremeció de gozo en el Esp ritu Santo y exclamó: 'Yo te bendigo, Padre, Se or del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a sabios y entendidos, y se las has revelado a gente sencilla. S, Padre; as lo has querido tú.


Los habitantes de N nive comparacerán en el juicio contra esta generación y la condenarán; porque ellos se convirtieron ante la predicación de Jonás, y aqu hay uno que es más que Jonás.


No temas, peque o reba o; que ha tenido a bien vuestro Padre daros el reino.


Pero a todos los que la recibieron, a aquellos que creen en su nombre, les dio potestad de llegar a ser hijos de Dios;


y no por la nación sola, sino también para reunir juntos a los hijos de Dios que estaban dispersos.


Jesús le responde: 'Suéltame, pues todav a no he subido al Padre, vete a mis hermanos y diles: 'Voy a subir a mi Padre y vuestro Padre; a mi Dios y vuestro Dios''.


Al o r esto, los gentiles se alegraban y glorificaban la palabra del Se or; y creyeron cuantos estaban destinados a vida eterna.


Y no es esto sólo; sino que también nosotros mismos, que poseemos las primicias del Esp ritu, gemimos igualmente en nuestro propio interior, aguardando con ansiedad una adopción filial, la redención de nuestro cuerpo.


Pablo, apóstol por llamamiento de Cristo Jesús, por voluntad de Dios, y el hermano Sóstenes,


Y porque el mundo no conoció, mediante su sabidur a, a Dios en la sabidur a de Dios, quiso Dios salvar, mediante la necedad del mensaje de la predicación, a los que tienen fe.


Y seré para vosotros padre, y vosotros seréis para m hijos e hijas, dice el Se or todopoderoso.


Todos, en efecto, sois hijos de Dios mediante la fe en Cristo Jesús.


En él mismo hemos sido también agraciados con la herencia, predestinados - según el previo decreto del que lo impulsa todo conforme a la decisión de su voluntad -


dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según el benévolo designio que se hab a formado de antemano


Pues es Dios quien, según su beneplácito, activa en vosotros tanto el querer como el obrar.


pues en él tuvo a bien residir toda la Plenitud,


Teniendo esto en cuenta, no cesamos de orar por vosotros, para que nuestro Dios os haga dignos de su llamada y lleve a cabo, con su poder, todo buen propósito y actividad de fe,


y el mismo Dios abonaba su testimonio con se ales prodigios y con toda suerte de milagros y dones de Esp ritu Santo, repartidos según su voluntad.


Ved qué gran amor nos ha dado el Padre: que nos llamemos hijos de Dios. ¡Y lo somos! Por eso no os conoce el mundo, porque no lo conoció a él.


El que venza, heredará estas cosas. Y yo seré su Dios y él será mi hijo.


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