Y ahora se alza contra tu sierva toda la parentela para decirme '¡Entréganos al fratricida para que le demos muerte por la vida de su hermano, al que asesinó; as exterminaremos también al heredero!''. De este modo extinguirán la brasa que me queda, y no dejarán a mi marido ni nombre ni resto sobre la haz de la tierra'.
Pero la mujer de Tecoa dijo al rey. '¡Caiga sobre m y sobre la casa de mi padre la culpa, oh mi se or el rey, y queden limpios de ella el rey y su trono!'.
Entonces el rey dijo a Sibá: 'Para ti será todo lo que pertenece a Meribaal'. Respondió Sibá: 'Me postro ante ti. ¡Goce yo de tu favor, oh rey, mi se or!'.