1 Samuel 25:36 - Biblia Castilian 2003

³⁶ Cuando Abigail volvió a casa de Nabal, éste estaba celebrando un fest n regio en su casa, y su corazón estaba alegre, pues estaba embriagado en demas a, por lo que nada le dijo ella, ni poco ni mucho, hasta el clarear del alba.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³⁶ Y Abigail volvió a Nabal, y he aquí que él tenía banquete en su casa como banquete de rey; y el corazón de Nabal estaba alegre, y estaba completamente ebrio, por lo cual ella no le declaró cosa alguna hasta el día siguiente.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁶ Cuando Abigail llegó a su casa, encontró a Nabal dando una gran fiesta digna de un rey. Estaba muy borracho, así que ella no le dijo nada sobre su encuentro con David hasta el amanecer del día siguiente.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁶ Cuando regresó Abigaíl, Nabal estaba sentado a la mesa en su casa para un banquete real. Nabal estaba muy alegre, completamente borracho, pero ella no le contó nada hasta la mañana siguiente.

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁶ Y Abigail volvió a Nabal, y he aquí que celebraba un banquete en su casa, como el banquete de un rey, y el corazón de Nabal estaba alegre, y estaba muy borracho, por lo cual ella no le informó ni poco ni mucho, hasta que amaneció.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁶ Cuando Abigail volvió a casa de Nabal, éste estaba celebrando un festín regio en su casa, y su corazón estaba alegre, pues estaba embriagado en demasía, por lo que nada le dijo ella, ni poco ni mucho, hasta el clarear del alba.

1 Samuel 25:36 Referans Kwoze

2 Samuel 13:23

Dos a os después, con motivo de tener Absalón esquiladores en Baal Jasor, cerca de Efra n, invitó a todos los hijos del rey.

2 Samuel 13:28

y dio a sus criados esta orden: '¡Estad atentos! Cuando el corazón de Amnón se haya alegrado con el vino y yo os diga: 'Herid a Amnón, matadlo', no temáis. ¿No soy yo quien os lo manda? ¡Tened ánimo y sed valientes!'.

2 Samuel 3:20

Llegó, pues, Abner a Hebrón ante David, acompa ado de veinte hombres. David preparó un fest n a Abner y a sus acompa antes.

1 Reyes 20:16

Hicieron una salida en torno al mediod a, mientras Ben Hadad estaba bebiendo en la tienda, ya borracho, junto con los treinta y dos reyes, sus auxiliares.

Salmos 112:5

Feliz el que se apiada y da prestado Tet y el que rige su hacienda con justicia: Yod

Proverbios 20:1

El vino es insolente; el licor, pendenciero; quien a ellos se entrega no es sabio.

Eclesiastés 10:19

Para divertirse se preparan los banquetes: el vino alegra la vida y el dinero sirve para todo.

Isaías 28:3

Con los pies será hollada la orgullosa corona de los ebrios de Efra n,

Isaías 5:11

¡Ay de quienes madrugan en busca de licores; y de quienes trasnochan hasta que el vino los enciende!

Jeremías 51:57

Embriagaré a sus pr ncipes y a sus sabios, a su gobernadores, a sus sátrapas y a sus guerreros, para que duerman sue o eterno y no despierten' - oráculo del Rey, cuyo nombre es Yahveh Sebaot -.

Oseas 4:11

(11a) a la prostitución. (11b) El vino y el mosto quitan el seso.

Nahum 1:10

Como mara a de zarzas, como paja reseca serán devorados los que se hartan de vino en sus festines.

Mateo 10:16

Mirad que os env o como ovejas en medio de lobos; sed, por tanto, cautelosos como serpientes y sencillos como palomas.

Lucas 14:12

Dec a también al que lo hab a invitado: 'Cuando des una comida o una cena, no convides a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a los vecinos ricos, no sea que también ellos a su vez te inviten, y ello te sirva de recompensa.

Lucas 21:34

Tened cuidado de vosotros mismos, no sea que vuestro corazón se embote por la crápula, la embriaguez y las preocupaciones de la vida, y caiga de improviso sobre vosotros aquel d a

Romanos 13:13

Como en pleno d a, caminemos con decencia: no en org as ni borracheras; no en fornicaciones ni lujurias; no en discordias ni envidias.

Efesios 5:14

Por eso se dice: 'Despiértate, tú que duermes, levántate de entre los muertos, y brillará sobre ti Cristo'.

Efesios 5:18

Y no os embriagueis con vino, que lleva al desenfreno, sino dejaos llenar de Esp ritu,

1 Samuel 25:19

Dijo luego a sus criados: 'Id por delante, que yo os seguiré'. Pero a Nabal, su marido, no le dijo nada.

1 Samuel 25:37

Por la ma ana, libre ya Nabal del efecto del vino, le contó su mujer todo, y se le quedó paralizado el corazón y como si fuese una piedra.