1 Crónicas 9:25 - Biblia Castilian 2003

²⁵ Sus hermanos, que estaban en sus aldeas, deb an venir de tiempo en tiempo junto a ellos por siete d as,

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁵ Y sus hermanos que estaban en sus aldeas, venían cada siete días según su turno para estar con ellos.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁵ Sus parientes en las aldeas venían con regularidad para ayudarles con las responsabilidades durante ciclos de siete días.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁵ Sus hermanos, que habitaban en poblados, tenían que venir periódicamente a estar con ellos durante siete días,

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁵ Y sus hermanos que vivían en las aldeas tenían que entrar cada siete días para estar con ellos de tiempo en tiempo.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁵ Sus hermanos, que estaban en sus aldeas, debían venir de tiempo en tiempo junto a ellos por siete días,

1 Crónicas 9:25 Referans Kwoze

2 Reyes 11:5

Y les dio esta orden: ' Vais a hacer esto: la tercera parte de vosotros que entra en servicio el sábado para montar la guardia del palacio real,

2 Reyes 11:7

pues los dos grupos vuestros, o sea, todos los que salen de servicio el sábado, montarán también la guardia en el templo de Yahveh, junto al rey.

1 Crónicas 24:19

Éstos fueron los turnos de servicio para entrar en el templo de Yahveh, conforme a la norma establecida por Aarón, su padre, de acuerdo con lo que le hab a ordenado Yahveh, Dios de Israel.

1 Crónicas 9:24

Hab a porteros a los cuatro vientos: al oriente, al occidente, al norte y al sur.

1 Crónicas 9:26

pero los cuatro jefes de los porteros estaban de servicio permanente. Hab a levitas encargados de las cámaras y de los tesoros del templo de Dios.

2 Crónicas 23:4

Vais a hacer esto: la tercera parte de vosotros, as sacerdotes como levitas, que entran de servicio el sábado, se pondrán de porteros en las entradas;

2 Crónicas 23:8

Los levitas y todo Judá cumplieron exactamente cuanto les hab a mandado el sacerdote Joadá. Y tomó cada uno sus hombres, los que entraban de servicio el sábado y los que sal an el sábado - pues el sacerdote Joadá no hab a permitido que los diversos turnos se dispersaran -.