Mateo 11:12 - Biblia Castellano Antiguo (Nuevo Testamento)

¹² Desde los días del ministerio de Juan el Bautista hasta hoy, se ha hecho violencia al reino de los cielos, y los violentos tratan de arrebatarlo.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹² Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹² Desde los días en que Juan el Bautista comenzó a predicar hasta ahora, el reino del cielo ha venido avanzando con fuerza, y gente violenta lo está atacando.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹² Desde los días de Juan Bautista hasta ahora el Reino de Dios es cosa que se conquista, y los más decididos son los que se adueñan de él.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹² Pero desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo toman por la fuerza.°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹² Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan.

Mateo 11:12 Referans Kwoze

Mateo 11:11

Os aseguro que entre todos los nacidos de mujer no ha habido ningún otro mayor que Juan el Bautista; sin embargo, el más insignificante del reino de los cielos es mayor que él.

Mateo 11:13

Porque todos los profetas y la ley de Moisés profetizaron hasta la llegada de Juan;

Mateo 3:15

Jesús le respondió: No te opongas, porque es necesario que cumplamos así la plenitud de la justicia.Juan cedió entonces.

Lucas 13:24

La puerta del cielo es estrecha, pero esforzaos a entrar por ella; pues lo cierto es que muchos tratarán de entrar, y no podrán.

Lucas 16:16

Hasta que Juan el Bautista comenzó a predicar, la ley y los escritos de los profetas tenían plena vigencia. Pero Juan anunció al mundo la buena noticia de la venida del reino de Dios, y desde entonces todos le hacen violencia.

Juan 5:4

Porque un ángel del Señor venía de tanto en tanto a agitarla, y se dlecía que el primero que bajaba al estanque después del movimiento del agua quedaba sano, cualquiera que fuese su enfermedad.

Juan 6:27

Pues bien, poned todo vuestro empeño en trabajar, no por una comida perecedera, sino por la comida permanente de la vida eterna, que es la comida que yo, el Hijo del hombre, os ofrezco, porque para eso me ha enviado Dios el Padre a este mundo.

Filipenses 2:12

Amados míos, mientras yo estaba entre vosotros obedecíais fielmente mis instrucciones; pues bien, ahora que estoy lejos procurad aún más comportaros como corresponde a quienes han sido llamados a salvación, obedeciendo a Dios con toda humildad y temor reverencial.