Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





1 Juan 4:10 - Biblia Castellano Antiguo (Nuevo Testamento)

10 En esto consiste el verdadero amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos ama a nosotros, y por amor envió a su Hijo único como sacrificio expiatorio por nuestros pecados.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

10 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

10 En esto consiste el amor verdadero: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros y envió a su Hijo como sacrificio para quitar nuestros pecados.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

10 En esto está el amor: no es que nosotros hayamos amado a Dios, sino que él nos amó primero y envió a su Hijo como víctima por nuestros pecados.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

10 En esto está° el amor: No en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él nos amó y envió a su Hijo como propiciación° por nuestros pecados.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

10 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y envió a su Hijo como sacrificio de purificación por nuestros pecados.

Gade chapit la Kopi




1 Juan 4:10
20 Referans Kwoze  

Por eso quiero dejaros un nuevo mandamiento: Amaos los unos a los otros. De la misma manera que yo os he amado, amaos también vosotros.


No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os he elegido a vosotros. Os he puesto para que vayáis y deis fruto, y que vuestro fruto tenga valor permanente; de esta forma, todo lo que le pidáis al Padre en mi nombre, él os lo dará.


Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo único para que todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna.


Yo soy el pan de vida que ha descendido del cielo: el que coma de este pan, vivirá para siempre. Este pan es mi propia carne, que yo daré para que el mundo reciba la vida verdadera.


Por eso era menester que en todo se asemejara a sus hermanos, es decir a nosotros, a fin de tener misericordia de nosotros, y ser, respecto de Dios, un fiel sumo sacerdote, apto para expiar los pecados del pueblo.


Cristo murió en la cruz llevando en su propio cuerpo la carga de nuestros pecados, para que nosotros, habiendo muerto con él al pecado, podamos vivir 'a la justicia. Por su herida mortal habéis sido vosotros sanados.


Ya sabéis que también Cristo padeció una sola vez a causa de los pecados, el justo por los injustos, para llevaros a la reconciliación con Dios. Ciertamente murió en el cuerpo, pero lo resucitó el Espíritu Santo,


que se ofreció en sacrificio por nuestros pecados, y no solo por los nuestros sino también por los de todo el mundo.


Mirad qué grande es el amor del Padre, que nos llamamos hijos de Dios, ¡y lo somos! Sin embargo, el mundo no nos reconoce porque no conoce a Dios.


Nosotros amamos a Dios porque él nos amó primero.


Y en esto consiste el testimonio: en que Dios nos ha concedido vida eterna, la vida que está en su Hijo.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite