Lucas 16:25 - Biblia del Siglo de Oro

²⁵ Pero Abraham le dijo: “Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro, males; pero ahora este es consolado aquí, y tú atormentado.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁵ Pero Abraham le dijo: Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro también males; pero ahora este es consolado aquí, y tú atormentado.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁵ »Abraham le dijo: “Hijo, recuerda que tuviste todo lo que quisiste durante tu vida, y Lázaro no tuvo nada. Ahora él está aquí recibiendo consuelo y tú estás en angustia.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁵ Abrahán le respondió: 'Hijo, recuerda que tú recibiste tus bienes durante la vida, mientras que Lázaro recibió males. Ahora él encuentra aquí consuelo y tú, en cambio, tormentos.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁵ Abraham respondió: Hijo, recuerda que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro asimismo los males, pero ahora es consolado aquí, y tú atormentado.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁵ Pero Abrahán le contestó: 'Hijo, acuérdate de que ya recibiste tus bienes en tu vida y Lázaro, en cambio, los males; ahora, pues, él tiene aquí el consuelo, mientras tú el tormento.

Lucas 16:25 Referans Kwoze

Job 22:18

Había colmado de bienes sus casas. ¡Lejos de mí sea el consejo de ellos!

Salmos 17:14

de los hombres, con tu mano, Jehová, de los hombres de este mundo, para quienes lo mejor es esta vida, y cuyo vientre está lleno de tus bienes. Sacian a sus hijos y aun les sobra para sus pequeños.

Salmos 49:11

Su íntimo pensamiento es que sus casas serán eternas, y sus habitaciones para generación y generación. ¡Dan sus nombres a sus tierras!

Salmos 73:7

Los ojos se les saltan de gordura; logran con creces los antojos del corazón.

Lamentaciones 1:7

Jerusalén, cuando cayó su pueblo en manos del enemigo y no hubo quien la ayudara, se acordó de los días de su aflicción, de sus rebeliones, y de todas las cosas agradables que tuvo desde los tiempos antiguos. La miraron los enemigos y se burlaron de su caída.

Daniel 5:30

La misma noche fue muerto Belsasar, rey de los caldeos.

Mateo 27:63

y le dijeron: —Señor, nos acordamos que aquel mentiroso, estando en vida, dijo: “Después de tres días resucitaré”.

Marcos 9:45

Y si tu pie te es ocasión de caer, córtalo, porque mejor te es entrar en la vida cojo, que teniendo dos pies ser arrojado al infierno, al fuego que no puede ser apagado,

Lucas 16:20

Había también un mendigo llamado Lázaro, que estaba echado a la puerta de aquel, lleno de llagas,

Lucas 16:23

»En el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno.

Lucas 16:26

Además de todo esto, una gran sima está puesta entre nosotros y vosotros, de manera que los que quieran pasar de aquí a vosotros no pueden, ni de allá pasar acá”.

Lucas 6:24

»Pero ¡ay de vosotros, ricos!, porque ya tenéis vuestro consuelo.

Juan 16:33

Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido al mundo.

Hechos 14:22

confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándolos a que permanecieran en la fe y diciéndoles: «Es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios».

Romanos 8:7

por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios, porque no se sujetan a la Ley de Dios, ni tampoco pueden;

Deuteronomio 28:17

»Maldita serán tu canasta y tu artesa de amasar.

Filipenses 3:19

El fin de ellos será la perdición. Su dios es el vientre, su gloria es aquello que debería avergonzarlos, y solo piensan en lo terrenal.

1 Tesalonicenses 3:3

a fin de que nadie se inquiete por estas tribulaciones, porque vosotros mismos sabéis que para esto estamos puestos.

Hebreos 11:25

prefiriendo ser maltratado con el pueblo de Dios, antes que gozar de los deleites temporales del pecado,

1 Juan 2:15

No améis al mundo ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él,

Apocalipsis 7:14

Yo le dije: «Señor, tú lo sabes». Él me dijo: «Estos son los que han salido de la gran tribulación; han lavado sus ropas y las han blanqueado en la sangre del Cordero.