Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Jonás 2:7 - Biblia del Siglo de Oro

7 Cuando mi alma desfallecía en mí, me acordé de Jehová, y mi oración llegó hasta ti, hasta tu santo Templo.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

7 Cuando mi alma desfallecía en mí, me acordé de Jehová, Y mi oración llegó hasta ti en tu santo templo.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

7 Cuando la vida se me escapaba, recordé al Señor. Elevé mi oración sincera hacia ti en tu santo templo.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

7 A las raíces de los montes descendí, al país cuyos cerrojos se cierran para siempre, pero me hiciste subir de la fosa, ¡oh Yavé, mi Dios!

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

7 Cuando mi alma desfallecía en mí, Me acordé de YHVH, Y mi oración llegó hasta ti en tu santa Casa.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

7 Hasta las raíces de los montes descendí, los cerrojos de la tierra se cerraban por siempre sobre mí. Mas tú sacaste mi vida de la fosa, Yahveh, Dios mío.

Gade chapit la Kopi




Jonás 2:7
23 Referans Kwoze  

Después los sacerdotes y levitas, puestos en pie, bendijeron al pueblo; y fue oída su voz, y su oración llegó hasta el cielo, su santa morada.


Jehová está en su santo Templo; Jehová tiene en el cielo su trono; sus ojos observan, sus párpados examinan a los hijos de los hombres.


Cuando mi espíritu se angustiaba dentro de mí, tú conocías mi senda. En el camino en que andaba, me escondieron lazo.


Me acordé de los días antiguos; meditaba en todas tus obras; reflexionaba en las obras de tus manos.


En mi angustia invoqué a Jehová y clamé a mi Dios. Él oyó mi voz desde su Templo y mi clamor llegó hasta sus oídos.


Estos confían en carros, y aquellos en caballos; mas nosotros del nombre de Jehová, nuestro Dios, haremos memoria.


He sido derramado como el agua y todos mis huesos se descoyuntaron. Mi corazón fue como cera, derritiéndose dentro de mí.


Hubiera yo desmayado, si no creyera que he de ver la bondad de Jehová en la tierra de los vivientes.


¿Por qué te abates, alma mía, y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios, porque aún he de alabarlo, ¡salvación mía y Dios mío!


¿Por qué te abates, alma mía, y te turbas dentro de mí? Espera en Dios, porque aún he de alabarlo, ¡salvación mía y Dios mío!


¿Por qué te abates, alma mía, y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios, porque aún he de alabarlo, ¡salvación mía y Dios mío!


Bienaventurado el que tú escojas y atraigas a ti para que habite en tus atrios. Seremos saciados del bien de tu Casa, de tu santo Templo.


He aquí gran amargura me sobrevino en la paz, pero a ti te agradó librar mi vida del hoyo de corrupción, porque echaste tras tus espaldas todos mis pecados.


¿Quién de entre vosotros teme a Jehová y escucha la voz de su siervo? El que anda en tinieblas y carece de luz, confíe en el nombre de Jehová y apóyese en su Dios.


Entonces dije: “Desechado soy de delante de tus ojos, mas aún veré tu santo Templo”.


«Oíd, pueblos todos; está atenta, tierra, y cuanto hay en ti. Jehová, el Señor, el Señor desde su santo templo, sea testigo contra vosotros.


Mas Jehová está en su santo Templo: ¡calle delante de él toda la tierra!».


Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar,


David se angustió mucho, porque el pueblo hablaba de apedrearlo, pues el alma de todo el pueblo estaba llena de amargura, cada uno por sus hijos y por sus hijas. Pero David halló fortaleza en Jehová, su Dios,


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite