Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





1 Samuel 27:10 - Biblia del Siglo de Oro

10 Y cuando Aquis le preguntaba: «¿Dónde habéis incursionado hoy?», David le respondía: «Por el Neguev de Judá» (o «por el Neguev de Jerameel» o «por el Neguev de los ceneos»).

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

10 Y decía Aquis: ¿Dónde habéis merodeado hoy? Y David decía: En el Neguev de Judá, y el Neguev de Jerameel, o en el Neguev de los ceneos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

10 —¿Dónde atacaste hoy? —le preguntaba Aquis. Y David respondía: —Atacamos al sur de Judá, a los jerameelitas y a los ceneos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

10 Aquis le decía: '¿A dónde fueron hoy?' Y David respondía: 'Al Negueb de Judá, o al Negueb de Yerajmeel o al Negueb de los quenitas'.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

10 Y Aquís preguntaba: ¿Dónde habéis tomado el despojo hoy? David respondía: Hacia el sur de Judá, o hacia el sur de los jerameelitas, o hacia el sur de los ceneos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

10 Preguntaba Aquís: '¿Dónde habéis hecho hoy la incursión?'. Y respondía David: 'Hacia el Negueb de Judá, hacia el Negueb de los yerajmeelitas, hacia el Negueb de los quenitas'.

Gade chapit la Kopi




1 Samuel 27:10
21 Referans Kwoze  

Volvió a preguntar Isaac: —¿Eres tú mi hijo Esaú? Jacob respondió: —Yo soy.


Al llegar los criados de Absalón a la casa de la mujer, le dijeron: —¿Dónde están Ahimaas y Jonatán? —Ya han pasado el vado de las aguas—respondió la mujer. Como ellos los buscaron y no los hallaron, volvieron a Jerusalén.


Los hijos de Jerameel, primogénito de Hezrón, fueron Ram, su primogénito, Buna, Orén, Ozem y Ahías.


Los hijos que nacieron a Hezrón: Jerameel, Ram y Quelubai.


La mentira aborrezco y abomino; tu Ley amo.


Aparta de mí el camino de la mentira y en tu misericordia concédeme tu Ley.


El temor del hombre le pone trampas; el que confía en Jehová está a salvo.


Al ver al ceneo, pronunció esta profecía: «Fuerte es tu habitación; en la peña está tu nido.


Por eso, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo, porque somos miembros los unos de los otros.


Y los hijos del ceneo, suegro de Moisés, subieron de la ciudad de las palmeras con los hijos de Judá al desierto de Judá, que está en el Neguev, cerca de Arad, y habitaron con el pueblo.


Heber, el ceneo, de los hijos de Hobab, suegro de Moisés, se había apartado de los ceneos y había plantado sus tiendas en el valle de Zaanaim, que está junto a Cedes.


»Bendita sea entre las mujeres Jael, mujer de Heber, el ceneo; entre las mujeres, bendita sea en la tienda.


Entonces dijo Saúl a los ceneos: «Idos, apartaos y salid de entre los de Amalec, para que no os destruya juntamente con ellos; porque vosotros mostrasteis misericordia a todos los hijos de Israel cuando subían de Egipto». Se apartaron los ceneos de entre los hijos de Amalec.


Respondió David al sacerdote Ahimelec: —El rey me encomendó un asunto, y me dijo: “Nadie sepa cosa alguna del asunto a que te envío, y de lo que te he encomendado”. He citado a los criados en cierto lugar.


Entonces llegó un mensajero y dijo a Saúl: «Ven en seguida, porque los filisteos han hecho una incursión en el país».


Ni hombre ni mujer dejaba David llegar con vida a Gat, pues decía: «No sea que den aviso de nosotros y digan: “Esto lo hizo David”». Esta fue su costumbre todo el tiempo que vivió en la tierra de los filisteos.


David dijo a Aquis: —¿Qué he hecho yo? ¿Qué has hallado en tu siervo desde que entré a tu servicio hasta el día de hoy, para que yo no vaya y pelee contra los enemigos del rey, mi señor?


Racal, a las ciudades de Jerameel, a las ciudades del ceneo,


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite