Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -

1 Corintios 14 - Biblia Lenguaje Básico


Las capacidades más importantes

1 Esforzaos, pues, en buscar el amor y pedid al Espíritu Santo que os capacite de manera especial para hablar de parte de Dios.

2-4 Cuando habláis en un idioma extraño, os ayudáis solo a vosotros mismos. Es verdad que Dios os entiende, pues habláis de verdades secretas que solo el Espíritu Santo conoce. Pero aparte de él, nadie más sabe lo que decís. En cambio, cuando Dios os manda hablar de su parte, la gente sí os entiende. Además, así ayudáis a todos en la Iglesia a confiar más en Cristo, a sentirse mejor y a estar alegres.

5 Me gustaría que todos hablarais en un lenguaje misterioso, pero más me gustaría que hablarais de parte de Dios. En realidad, es más importante hablar de parte de Dios que hablar en lenguas que otros no entienden, a menos que alguien pueda interpretar lo que se dice. Porque así se ayuda a los miembros de la Iglesia.

6 Hermanos míos, si yo fuera a visitaros y os hablara en lenguas que no entendéis, ¿de qué os serviría? Solamente os ayudaría si os diera a conocer algo desconocido, o si os diera algún conocimiento, o si os comunicara algún mensaje de parte de Dios, o alguna enseñanza.

7 Si todos los instrumentos musicales tuvieran el mismo sonido, ¿cómo podría distinguirse una flauta de un arpa?

8 Si en una guerra nadie pudiera distinguir el toque de trompeta que anuncia la batalla, ninguno se prepararía para combatir.

9 Algo así pasa cuando habláis en un lenguaje misterioso. Si nadie entiende lo que significa, es como si estuvierais hablando a una pared.

10 En el mundo hay muchas lenguas y en todas ellas se pueden decir cosas con sentido.

11 Pero si alguien me habla y yo no entiendo lo que dice, esa persona pensará que soy un extranjero. Y lo mismo pensaré yo si esa persona no me entiende a mí.

12 Por eso, ya que tanto deseáis las capacidades que concede el Espíritu, tratad de tener aquellas que ayuden a todos los de la Iglesia.

13 Por lo tanto, cuando habléis en un lenguaje misterioso, debéis pedirle a Dios que os dé la capacidad de explicar lo que estéis diciendo.

14 Por ejemplo, si yo oro en un lenguaje misterioso, el que ora es mi espíritu, pero mi entendimiento no se aprovecha de nada.

15 ¿Qué debo hacer entonces? Pues orar movido por el Espíritu, pero procurando entender lo que digo; cantar movido por el Espíritu, pero procurando entender lo que canto.

16 Porque si tú das gracias a Dios movido por el Espíritu y te escucha un creyente no instruido, no podrá unirse a tu oración si no entiende lo que dices. Y no podrá hacerlo, porque no habrá comprendido nada.

17 Tu oración podrá ser muy buena, pero no estarás ayudando a nadie.

18 Yo le doy gracias a Dios por hablar en un lenguaje misterioso mejor que todos vosotros.

19 Sin embargo, cuando nos reunimos en comunidad, prefiero decir cinco palabras que se entiendan y que ayuden a otros, más que diez mil palabras en una lengua que nadie entiende.

20 Hermanos en Cristo, sed inocentes como niños en lo que se refiere al mal, pero sed personas maduras en vuestro modo de pensar.

21 Dios dice en las Escrituras: Le hablaré a este pueblo por medio de extranjeros y en otros idiomas. ¡Pero ni así me harán caso!

22 Por lo tanto, hablar en un lenguaje misterioso será como una señal para los no cristianos, pero para los cristianos ese lenguaje no sirve para nada. En cambio, los mensajes de parte de Dios son para los cristianos, no para los que no creen en él.

23 Supongamos que todos los de la comunidad se reúnen y comienzan a hablar en un lenguaje misterioso. Si en ese momento entra gente de fuera o llegan algunos que no creen en Cristo, van a pensar que estáis locos.

24 Pero si todos habláis de parte de Dios, esa gente se dará cuenta de que es pecadora,

25 y os confiará hasta sus pensamientos más secretos. Luego se arrodillará delante de Dios, lo adorará, y reconocerá que, en verdad, Dios está entre vosotros.


Las reuniones de la iglesia

26 Hermanos míos, cuando os reunáis, todo lo que hagáis debe ayudar a los demás. Unos pueden cantar, otros pueden enseñar o comunicar lo que Dios les haya mostrado, otros pueden hablar en un lenguaje misterioso, o interpretar lo que se dice con ese lenguaje.

27 Si algunos hablan un lenguaje misterioso, que no sean más de dos o tres personas, y que cada uno espere su turno para hablar. Además, alguien debe interpretar lo que estén diciendo.

28 Pero si no hay en la comunidad nadie que sepa interpretarlo, entonces deben callarse, o hablar solo para sí mismos y para Dios.

29 Igualmente, si algunos hablan de parte de Dios, que sean solo dos o tres personas. Los demás deben prestar atención, para ver si el mensaje es de parte de Dios o no.

30 Pero si alguno de los asistentes recibe un mensaje especial de parte de Dios, el que está hablando debe callarse y dejar que la otra persona diga lo que tenga que decir.

31 Así todos tendrán la oportunidad de anunciar un mensaje de Dios, y todos los que escuchan podrán aprender y sentirse animados.

32 La persona que hable de parte de Dios deberá decidir cuándo hablar y cuándo callar.

33 Porque a Dios no le gusta el desorden, sino la paz. Como es costumbre en todas las comunidades cristianas,

34 no se debe permitir que las mujeres hablen en las reuniones. La ley de Moisés dice que las mujeres deben aprender en silencio.

35 Si quieren saber algo, que les pregunten a sus maridos cuando ya estén en su casa. No está bien visto que la mujer hable en la comunidad.

36 No salió de vosotros el mensaje de Dios, ni fuisteis los únicos que lo recibieron.

37 Si alguien cree que puede hablar de parte de Dios o cree que obedece al Espíritu Santo en todo, debe reconocer que esto que os escribo es un mandato de Dios.

38 Pero si no lo quiere reconocer así, tampoco él será reconocido por Dios.

39 Mis queridos hermanos, está muy bien que queráis hablar de parte de Dios, pero no pongáis obstáculos a quienes hablen un lenguaje misterioso.

40 Pero hacedlo todo de manera correcta y ordenada.

Swiv nou:



Piblisite