Montando sobre un querubín, surcó los cielos y se remontó sobre las alas del viento.
Cabalgó sobre un querubín, y voló; Voló sobre las alas del viento.
Voló montado sobre un poderoso ser angelical, remontándose sobre las alas del viento.
Montó en un querubín y emprendió vuelo; planeaba sobre las alas del viento.
Cabalgó sobre un querubín y voló, Precipitándose sobre las alas del viento.
Luego inclina los cielos y desciende, las nubes debajo de sus pies.
Y cabalgó sobre un querubín, y voló: Voló sobre las alas del viento.
Afirmas sobre las aguas tus altos aposentos y haces de las nubes tu carro de guerra. Tú cabalgas en las alas del viento.
Abre tus cielos, Señor, y desciende; toca los montes y haz que echen humo.
Pastor de Israel, ¡escúchanos! tú que guías a José como a un rebaño, tú que tienes tu trono entre los querubines, ¡resplandece!
El Señor es rey: que tiemblen las naciones. Él tiene su trono entre los querubines: que se estremezca la tierra.
Estamos como si nunca nos hubieras gobernado, como si nunca hubiéramos llevado tu nombre.