y dijo: «Señor, Dios de Israel, no hay Dios como tú arriba en el cielo ni abajo en la tierra, pues tú cumples tu pacto de amor con quienes te sirven y te siguen de todo corazón.
Nehemías 1:5 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Le dije: «Señor, Dios del cielo, grande y temible, que cumples el pacto y eres fiel con los que te aman y obedecen tus mandamientos, Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y dije: Te ruego, oh Jehová, Dios de los cielos, fuerte, grande y temible, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos; Biblia Nueva Traducción Viviente y dije: «Oh Señor, Dios del cielo, Dios grande y temible que cumples tu pacto de amor inagotable con los que te aman y obedecen tus mandatos, Biblia Católica (Latinoamericana) y le decía: '¡Ay, Yavé, Dios del Cielo, Dios grande y terrible, que mantienes tu Alianza y tu fidelidad con los que te aman y cumplen tus mandamientos!' La Biblia Textual 3a Edicion y exclamé: ¡Ay YHVH, Dios de los cielos! Grande y terrible° Dios, que guarda el pacto y la misericordia a los que lo aman y guardan sus mandamientos: Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y dije: '¡Ay, Yahveh, Dios del cielo, Dios grande y terrible, que eres fiel a la alianza y a la misericordia para con los que te aman y observan tus mandamientos! Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dije: Te ruego, oh Jehová, Dios del cielo, fuerte, grande y terrible, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos; |
y dijo: «Señor, Dios de Israel, no hay Dios como tú arriba en el cielo ni abajo en la tierra, pues tú cumples tu pacto de amor con quienes te sirven y te siguen de todo corazón.
¿Y qué nación se puede comparar con tu pueblo Israel? Es la única nación en la tierra que tú has redimido para hacerla tu propio pueblo y para dar a conocer tu nombre. Hiciste grandes y asombrosas maravillas cuando al paso de tu pueblo, al cual redimiste de Egipto, expulsaste a las naciones y a sus dioses.
«Esto es lo que ordena Ciro, rey de Persia: »El Señor, Dios del cielo, que me ha dado todos los reinos de la tierra, me ha encargado que le construya un templo en la ciudad de Jerusalén, que está en Judá.
Luego de examinar la situación, me levanté y dije a los nobles y oficiales, y al resto del pueblo: «¡No les tengan miedo! Acuérdense del Señor, que es grande y temible, y peleen por sus hermanos, por sus hijos e hijas, y por sus esposas y sus hogares».
»Y ahora, Dios nuestro, Dios grande, temible y poderoso, que cumples el pacto y eres fiel, no tengas en poco los sufrimientos que han padecido nuestros reyes, líderes, sacerdotes y profetas, nuestros antepasados y todo tu pueblo, desde los reyes de Asiria hasta hoy.
Desde el cielo diste a conocer tu veredicto; la tierra, temerosa, guardó silencio
Declararé que tu gran amor permanece firme para siempre, que has afirmado en el cielo tu fidelidad.
Dijiste: «He hecho un pacto con mi escogido; le he jurado a David mi siervo:
¿Quién como tú, Señor Dios de los Ejércitos, rodeado de poder y de fidelidad?
Por el contrario, cuando me aman fielmente y cumplen mis mandamientos, les muestro mi amor por mil generaciones.
Si prestas atención a estas leyes, las cumples y las obedeces, entonces el Señor tu Dios cumplirá el pacto que bajo juramento hizo con tus antepasados, y te mostrará su amor fiel.
No te asustes ante ellos, pues el Señor tu Dios, el Dios grande y temible, está contigo.
Por tanto, reconoce que el Señor tu Dios es el único Dios, el Dios fiel, que cumple su pacto por mil generaciones y muestra su fiel amor a quienes lo aman y obedecen sus mandamientos,