»Luego degollará el macho cabrío del sacrificio por el perdón en favor del pueblo. Llevará su sangre detrás de la cortina y hará con esa sangre lo mismo que hizo con la del novillo: la rociará sobre y delante de la tapa del arca.
Levítico 23:19 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Luego sacrificarán un macho cabrío como ofrenda por el pecado y dos corderos de un año como sacrificio de comunión. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Ofreceréis además un macho cabrío por expiación, y dos corderos de un año en sacrificio de ofrenda de paz. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego deberás ofrecer un chivo como ofrenda por el pecado y dos corderos de un año como ofrenda de paz. Biblia Católica (Latinoamericana) Sacrificarán también un macho cabrío en sacrificio por el pecado y dos corderos de un año en sacrificio de comunión. La Biblia Textual 3a Edicion También prepararéis un macho cabrío como ofrenda por el pecado y dos corderos añales en sacrificio de ofrendas de paz. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ofreceréis también un macho cabrío en sacrificio por el pecado y dos corderos de un año como sacrificio de comunión. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ofreceréis además un macho cabrío como ofrenda por el pecado; y dos corderos de un año en sacrificio de ofrendas de paz. |
»Luego degollará el macho cabrío del sacrificio por el perdón en favor del pueblo. Llevará su sangre detrás de la cortina y hará con esa sangre lo mismo que hizo con la del novillo: la rociará sobre y delante de la tapa del arca.
Junto con el pan deberán presentar siete corderos de un año, sin defecto, un ternero y dos carneros. Serán, junto con sus ofrendas de cereal y sus ofrendas líquidas, un holocausto al Señor, una ofrenda puesta al fuego cuyo aroma es grato al Señor.
El sacerdote mecerá los dos corderos, junto con el pan de las primicias. Son una ofrenda mecida ante el Señor, una ofrenda consagrada al Señor y reservada para el sacerdote.
Si el pecado de la comunidad pasa inadvertido, esta ofrecerá un ternero como holocausto de aroma grato al Señor, junto con la ofrenda líquida, la ofrenda de cereal y un macho cabrío como sacrificio por el perdón de pecados, tal como está ordenado.
En efecto, la Ley no pudo liberarnos porque la carne anuló su poder; por eso Dios envió a su propio Hijo en una condición semejante a la de los pecadores, para que se ofreciera en sacrificio por el pecado. Así condenó Dios al pecado en la carne,
Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador, para que en él recibiéramos la justicia de Dios.