Te ganarás el pan con el sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la misma tierra de la cual fuiste sacado. Porque polvo eres y al polvo volverás».
Hechos 13:36 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 »En verdad David, después de servir a su propia generación conforme al propósito de Dios, murió, fue sepultado con sus antepasados y su cuerpo sufrió la corrupción. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque a la verdad David, habiendo servido a su propia generación según la voluntad de Dios, durmió, y fue reunido con sus padres, y vio corrupción. Biblia Nueva Traducción Viviente Este salmo no hace referencia a David, pues, después de haber hecho la voluntad de Dios en su propia generación, David murió, fue enterrado con sus antepasados y su cuerpo se descompuso. Biblia Católica (Latinoamericana) Bien saben que David, después de haber servido durante su vida a los designios de Dios, murió, se reunió con sus padres y experimentó la corrupción. La Biblia Textual 3a Edicion Porque David, ciertamente, habiendo servido al propósito de Dios en su propia generación, durmió, fue sepultado con sus padres y vio corrupción. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ahora bien, David, después de haber servido durante su vida al designio de Dios, murió y fue a reunirse con sus padres y experimentó corrupción. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque a la verdad David, habiendo servido a su propia generación por la voluntad de Dios, durmió, y fue reunido con sus padres, y vio corrupción. |
Te ganarás el pan con el sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la misma tierra de la cual fuiste sacado. Porque polvo eres y al polvo volverás».
Cuando tu vida llegue a su fin y vayas a descansar entre tus antepasados, yo pondré en el trono a uno de tus propios descendientes y afirmaré su reino.
Ya desde antes, cuando Saúl era rey, usted dirigía a Israel en sus campañas. Además el Señor su Dios le dijo a usted: “Tú pastorearás a mi pueblo Israel y lo gobernarás”».
Cuando tu vida llegue a su fin y vayas a reunirte con tus antepasados, yo pondré en el trono a uno de tus descendientes, a uno de tus hijos, y afirmaré su reino.
David reinó sobre todo Israel, gobernando al pueblo entero con justicia y rectitud.
Y murió muy anciano y entrado en años, en medio de grandes honores y riquezas, y su hijo Salomón lo sucedió en el trono.
Cuando Roboán murió, fue sepultado en la Ciudad de David; su hijo Abías lo sucedió en el trono.
Josafat murió y fue sepultado con sus antepasados en la Ciudad de David; su hijo Jorán lo sucedió en el trono.
Cuando Uzías murió, fue sepultado con sus antepasados en un campo cercano al panteón de los reyes, pues padecía de una enfermedad en la piel. Y su hijo Jotán lo sucedió en el trono.
Cuando murió, fue sepultado en la Ciudad de David, su padre, y su hijo Roboán lo sucedió en el trono.
he de llamar “padre mío” a la corrupción y “madre” y “hermana” a los gusanos.
Como ovejas guiadas por la muerte, están destinados al sepulcro. Sus cuerpos se consumirán allí, lejos de sus mansiones suntuosas. Por la mañana los justos prevalecerán sobre ellos.
El que había recibido las cinco mil fue enseguida y negoció con ellas y ganó otras cinco mil.
—Quiten la piedra —ordenó Jesús. Marta, la hermana del difunto, objetó: —Señor, ya debe oler mal, pues lleva cuatro días allí.
Tras destituir a Saúl, puso por rey a David, de quien dio este testimonio: “He encontrado en David, hijo de Isaí, un hombre conforme a mi corazón; él hará todo lo que yo quiera”.
»Hermanos, permítanme hablarles con franqueza acerca del patriarca David, quien murió y fue sepultado, y cuyo sepulcro está entre nosotros hasta el día de hoy.
Luego cayó de rodillas y gritó: —¡Señor, no les tomes en cuenta este pecado! Cuando hubo dicho esto, murió.
Y Saulo estaba allí, aprobando la muerte de Esteban. Aquel día se desató una gran persecución contra la iglesia en Jerusalén y todos, excepto los apóstoles, se dispersaron por las regiones de Judea y Samaria.
Después se apareció a más de quinientos hermanos a la vez, la mayoría de los cuales vive todavía, aunque algunos han muerto.
Hermanos, no queremos que ignoren lo que va a pasar con los que ya han muerto, para que no se entristezcan como esos otros que no tienen esperanza.