Lot salió para hablar con sus futuros yernos, es decir, con los prometidos de sus hijas. —¡Apúrense! —les dijo—. ¡Abandonen la ciudad porque el Señor está por destruirla! Pero ellos creían que Lot estaba bromeando,
Génesis 34:9 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Háganse parientes nuestros. Intercambiemos nuestras hijas en casamiento. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y emparentad con nosotros; dadnos vuestras hijas, y tomad vosotros las nuestras. Biblia Nueva Traducción Viviente De hecho, formemos también otros matrimonios: ustedes nos entregan a sus hijas para nuestros hijos, y nosotros les entregaremos a nuestras hijas para los hijos de ustedes. Biblia Católica (Latinoamericana) Sean nuestros parientes, dennos sus hijas, y tomen las nuestras. La Biblia Textual 3a Edicion Emparentad con nosotros, dadnos vuestras hijas y tomad nuestras hijas para vosotros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Emparentad con nosotros: dadnos vuestras hijas, y tomad las nuestras para vosotros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y emparentad con nosotros; dadnos vuestras hijas, y tomad vosotros las nuestras. |
Lot salió para hablar con sus futuros yernos, es decir, con los prometidos de sus hijas. —¡Apúrense! —les dijo—. ¡Abandonen la ciudad porque el Señor está por destruirla! Pero ellos creían que Lot estaba bromeando,
y júrame por el Señor, el Dios del cielo y de la tierra, que no tomarás de esta tierra de Canaán, donde yo habito, una mujer para mi hijo
Luego Rebeca dijo a Isaac: —Estas mujeres hititas me tienen cansada. Me han quitado las ganas de vivir. Si Jacob se llega a casar con una de las hititas que viven en este país, ¡más me valdría morir!
Así ustedes podrán vivir entre nosotros y el país quedará a su disposición para que lo habiten, hagan negocios y adquieran terrenos.
Pero Jamor les dijo: —Mi hijo Siquén está enamorado de la hermana de ustedes. Por favor, permitan que ella se case con él.
los hijos de Dios vieron que las hijas de los seres humanos eran hermosas. Entonces tomaron como mujeres a todas las que desearon.
¿Cómo es posible que volvamos a quebrantar tus mandamientos contrayendo matrimonio con las mujeres de estos pueblos que tienen prácticas abominables? ¿Acaso no sería justo que te enojaras con nosotros y nos destruyeras hasta no dejar remanente ni que nadie escape?
Tampoco te unirás en matrimonio con ninguna de esas naciones; no darás tus hijas a sus hijos ni tomarás sus hijas para tus hijos,