Al tercer día, cuando los varones todavía estaban muy adoloridos, dos de los hijos de Jacob, Simeón y Leví, hermanos de Dina, empuñaron cada uno su espada y fueron a la ciudad, donde los varones se encontraban desprevenidos, y los mataron a todos.
Génesis 34:26 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 También mataron a filo de espada a Jamor y a su hijo Siquén, sacaron a Dina de la casa de Siquén y se retiraron. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y a Hamor y a Siquem su hijo los mataron a filo de espada; y tomaron a Dina de casa de Siquem, y se fueron. Biblia Nueva Traducción Viviente entre ellos Hamor y su hijo Siquem. Los mataron a espada, y después sacaron a Dina de la casa de Siquem y regresaron a su campamento. Biblia Católica (Latinoamericana) Mataron a Hamor y a su hijo Siquem, y tomando a Dina de la casa de Siquem, se fueron. La Biblia Textual 3a Edicion Y asesinaron a filo de cuchillo a Hamor y a Siquem su hijo, y sacaron a Dina de la casa de Siquem, y salieron. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pasaron a filo de espada a Jamor y a su hijo Siquén, tomaron a Dina de la casa de Siquén, y se salieron. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y a Hamor y a Siquem, su hijo, los mataron a filo de espada; y tomaron a Dina de casa de Siquem, y salieron. |
Al tercer día, cuando los varones todavía estaban muy adoloridos, dos de los hijos de Jacob, Simeón y Leví, hermanos de Dina, empuñaron cada uno su espada y fueron a la ciudad, donde los varones se encontraban desprevenidos, y los mataron a todos.
Luego los otros hijos de Jacob llegaron y, pasando sobre los cadáveres, saquearon la ciudad en venganza por la deshonra que había sufrido su hermana.
Abner gritó a Joab: —¿Vamos a dejar que siga esta matanza? ¿No te das cuenta de que esto solo traerá amargura? ¿Qué esperas para ordenarles a tus soldados que dejen de perseguir a sus hermanos?
«Asiria caerá a espada, pero no de hombre; una espada, pero no de mortales, la consumirá. Huirá para escapar de la espada, y sus jóvenes serán sometidos a trabajos forzados.
Caerán a filo de espada y los llevarán cautivos a todas las naciones. Los que no son judíos pisotearán a Jerusalén, hasta que se cumplan los tiempos señalados para ellos.
Mis flechas se embriagarán de sangre y mi espada se hartará de carne: sangre de heridos y de cautivos, cabezas de líderes enemigos».