el Señor dice: ‘¡Ahora vas a saber que yo soy el Señor!’. Con esta vara que llevo en la mano voy a golpear las aguas del Nilo y el río se convertirá en sangre.
Ezequiel 32:6 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Con tu sangre empaparé la tierra hasta la cima de las montañas; con tu sangre llenaré los canales de los ríos. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y regaré de tu sangre la tierra donde nadas, hasta los montes; y los arroyos se llenarán de ti. Biblia Nueva Traducción Viviente Empaparé la tierra con la sangre que brote de ti, que correrá hasta las montañas y llenará los barrancos hasta el borde. Biblia Católica (Latinoamericana) y con tu sangre regaré el país La Biblia Textual 3a Edicion Regaré con tu sangre la tierra donde nadas, Hasta los montes, y los cauces de los torrentes se llenarán de ti. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Empaparé la tierra de tu sangre, se henchirán de ella las montañas y los barrancos se llenarán de ti. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y regaré con tu sangre la tierra donde nadas, aun hasta las montañas; y los ríos se llenarán de ti. |
el Señor dice: ‘¡Ahora vas a saber que yo soy el Señor!’. Con esta vara que llevo en la mano voy a golpear las aguas del Nilo y el río se convertirá en sangre.
Serán arrojados sus muertos, hedor despedirán sus cadáveres, su sangre corre por las montañas.
Y con ellos caerán los toros salvajes, los terneros y los novillos. Su tierra quedará empapada en sangre y su polvo se llenará de grasa.
Por lo tanto, tan cierto como que yo vivo, afirma el Señor y Dios, te entregaré a la sangre y la sangre te perseguirá. Porque no aborreciste el derramamiento de sangre, esta te perseguirá.
Llenaré de heridos tus montes; los que han muerto a filo de espada cubrirán tus colinas, tus valles y los canales de tus ríos.
Las uvas fueron exprimidas fuera de la ciudad y del lagar salió sangre, la cual llegó hasta los frenos de los caballos en una extensión de mil seiscientos estadios.
Ellos derramaron la sangre de creyentes y de profetas, y tú les has dado a beber sangre, como se lo merecen».