A los que sufren, Dios los libra mediante el sufrimiento; se vale de la aflicción para instruirlos.
Daniel 6:27 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Él rescata y salva; hace señales y maravillas en los cielos y en la tierra. ¡Ha salvado a Daniel de las garras de los leones! Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Él salva y libra, y hace señales y maravillas en el cielo y en la tierra; él ha librado a Daniel del poder de los leones. Biblia Nueva Traducción Viviente Él rescata y salva a su pueblo; realiza señales milagrosas y maravillas en los cielos y en la tierra. Él ha rescatado a Daniel del poder de los leones». Biblia Católica (Latinoamericana) El salva y libra, realiza señales y prodigios en los cielos y en la tierra: él salvó a Daniel de las garras y de los dientes de los leones'. La Biblia Textual 3a Edicion Él salva y Él libra, y hace también señales y maravillas en los cielos y en la tierra, y Él ha librado a Daniel del poder de los leones. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por mí mismo promulgo este decreto: en todos los dominios de mi reino teman todos y tiemblen ante el Dios de Daniel, porque él es el Dios vivo que subsiste eternamente; su reino no será destruido, y su imperio durará hasta el fin. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Que salva y libra, y hace señales y maravillas en el cielo y en la tierra; el cual libró a Daniel del poder de los leones. |
A los que sufren, Dios los libra mediante el sufrimiento; se vale de la aflicción para instruirlos.
Tu reino es un reino eterno; tu dominio permanece por todas las generaciones. Fiel es el Señor a su palabra y santo en todas sus obras.
Tú me libras de mis enemigos, me exaltas por encima de mis adversarios, me salvas de los hombres violentos.
Él da grandes victorias a su rey; a su ungido David y a sus descendientes les muestra por siempre su gran amor.
Tú eres mi refugio; tú me protegerás del peligro y me rodearás con cánticos de liberación. Selah
¿Hasta cuándo, Señor, vas a tolerar esto? Libra mi vida, mi única vida, de los ataques de esos leones.
Ustedes, que aman al Señor, odien el mal; él protege la vida de sus fieles y los libra de manos de los malvados.
Pero el Señor es el Dios verdadero, el Dios viviente, el Rey eterno. Cuando se enoja, tiembla la tierra; las naciones no pueden soportar su ira.
»En los días de estos reyes el Dios del cielo establecerá un reino que jamás será destruido ni entregado a otro pueblo, sino que permanecerá para siempre y hará pedazos a todos estos reinos.
No había terminado de hablar cuando se escuchó una voz que desde el cielo decía: «Este es el decreto en cuanto a ti, rey Nabucodonosor. Tu autoridad real se te ha quitado.
Pasado ese tiempo yo, Nabucodonosor, elevé los ojos al cielo y recobré el juicio. Entonces alabé al Altísimo; honré y glorifiqué al que vive para siempre: Su dominio es eterno; su reino permanece para siempre.
Ninguno de los pueblos de la tierra merece ser tomado en cuenta. Dios hace lo que quiere con los poderes celestiales y con los pueblos de la tierra. No hay quien se oponga a su poder ni quien le pida cuentas de sus actos.
Ya cerca, lleno de ansiedad gritó: —Daniel, siervo del Dios viviente, ¿pudo tu Dios, a quien sirves continuamente, salvarte de los leones?
Por eso, extiende tu mano para sanar y hacer señales y prodigios mediante el nombre de tu santo siervo Jesús».
A la vez, Dios ratificó su testimonio acerca de ella con señales, prodigios, diversos milagros y dones distribuidos por el Espíritu Santo según su voluntad.
David preguntó a los que estaban con él: —¿Qué dicen que darán a quien mate a ese filisteo y salve así el honor de Israel? ¿Quién es este filisteo incircunciso, que se atreve a desafiar al ejército del Dios viviente?