Y si me voy y se lo preparo, vendré para llevármelos conmigo. Así ustedes estarán donde yo esté.
1 Corintios 11:26 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Porque cada vez que comen este pan y beben de esta copa, proclaman la muerte del Señor hasta que él venga. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Así, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues, cada vez que coman este pan y beban de esta copa, anuncian la muerte del Señor hasta que él vuelva. Biblia Católica (Latinoamericana) Fíjense bien: cada vez que comen de este pan y beben de esta copa están proclamando la muerte del Señor hasta que venga. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces, tan a menudo° como comáis este pan y bebáis la copa, la muerte del Señor proclamáis° hasta que venga. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque cada vez que coméis de este pan y bebéis de esta copa, estáis anunciando la muerte del Señor, hasta que venga'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que Él venga. |
Y si me voy y se lo preparo, vendré para llevármelos conmigo. Así ustedes estarán donde yo esté.
Jesús dijo: —Si quiero que él permanezca vivo hasta que yo vuelva, ¿a ti qué? Tú solo sígueme.
Por este motivo corrió entre los hermanos el rumor de que aquel discípulo no moriría. Pero Jesús no dijo que no moriría, sino solamente: «Si quiero que él permanezca vivo hasta que yo vuelva, ¿a ti qué?».
que les dijeron: —Galileos, ¿qué hacen aquí mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido llevado de entre ustedes al cielo, vendrá otra vez de la misma manera que lo han visto irse.
pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; después, cuando él venga, los que le pertenecen.
Por lo tanto, no juzguen nada antes de tiempo; esperen hasta que venga el Señor. Él sacará a la luz lo que está oculto en la oscuridad y pondrá al descubierto las intenciones de cada corazón. Entonces cada uno recibirá de Dios la alabanza que le corresponda.
El Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero.
el día en que venga para ser glorificado por su pueblo santo y admirado por todos los que hayan creído, entre los cuales están ustedes porque creyeron el testimonio que dimos.
también Cristo fue ofrecido en sacrificio una sola vez para quitar los pecados de muchos. Aparecerá por segunda vez ya no para cargar con pecado alguno, sino para traer salvación a quienes lo esperan.
Pero el día del Señor vendrá como un ladrón. En aquel día los cielos desaparecerán con un estruendo espantoso, los elementos serán destruidos por el fuego; y la tierra, con todo lo que hay en ella, será quemada.
Y ahora, queridos hijos, permanezcan en él para que, cuando se manifieste, podamos presentarnos ante él confiadamente, seguros de no ser avergonzados en su venida.
También Enoc, el séptimo patriarca a partir de Adán, profetizó acerca de ellos: «Miren, el Señor viene con millares y millares de sus santos,
¡Miren que viene en las nubes! Y todos lo verán con sus propios ojos, incluso quienes lo traspasaron; y por él harán lamentación todos los pueblos de la tierra. ¡Así será! Amén.
El que da testimonio de estas cosas dice: «Sí, vengo pronto». Amén. ¡Ven, Señor Jesús!