¿Quién es un criado responsable y atento? Es aquel a quien el amo pone al cargo de todos los demás sirvientes para que tengan preparada la comida a su debido tiempo.
Lucas 16:10 - Biblia Lenguaje Básico Al que cuida bien lo que vale poco, también se le puede confiar lo que vale mucho. Y el que no es fiel con lo de poco valor, tampoco lo será con lo de mucho valor. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 El que es fiel en lo muy poco, también en lo más es fiel; y el que en lo muy poco es injusto, también en lo más es injusto. Biblia Nueva Traducción Viviente »Si son fieles en las cosas pequeñas, serán fieles en las grandes; pero si son deshonestos en las cosas pequeñas, no actuarán con honradez en las responsabilidades más grandes. Biblia Católica (Latinoamericana) El que ha sido digno de confianza en cosas sin importancia, será digno de confianza también en las importantes; y el que no ha sido honrado en las cosas mínimas, tampoco será honrado en las cosas importantes. La Biblia Textual 3a Edicion El que es fiel en lo muy poco, también es fiel en lo mucho, y el que en lo muy poco es infiel, también en lo mucho es infiel. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El que es fiel en lo poco también lo es en lo mucho; y el que es injusto en lo poco, también lo es en lo mucho. Biblia Reina Valera Gómez (2023) El que es fiel en lo muy poco, también en lo más es fiel; y el que en lo muy poco es injusto, también en lo más es injusto. |
¿Quién es un criado responsable y atento? Es aquel a quien el amo pone al cargo de todos los demás sirvientes para que tengan preparada la comida a su debido tiempo.
El hombre le dijo: «¡Excelente! Eres un empleado bueno y se puede confiar en ti. Ya que has administrado bien lo poco que te di, ahora voy a encargarte cosas más importantes. Vamos a celebrarlo».
El hombre le contestó: «¡Excelente! Eres un empleado bueno y se puede confiar en ti. Ya que has administrado bien lo poco que te di, ahora voy a encargarte cosas más importantes. Vamos a celebrarlo».
El rey le dijo: «¡Excelente!, eres un empleado bueno. Ya que has administrado muy bien lo poco que te di, te nombro gobernador de diez ciudades».
Entonces Jesús le dijo a Judas: —¡Déjala tranquila! Ella estaba guardando ese perfume para el día de mi entierro. En cuanto a los pobres, siempre los tendréis cerca de vosotros, pero a mí no siempre me tendréis. En realidad, a Judas no le importaban los pobres; dijo eso porque era un ladrón y, como él era el encargado de cuidar el dinero de Jesús y de los discípulos, a veces se quedaba con parte de ese dinero.
Habían comenzado la cena, y el diablo ya había hecho que Judas, el hijo de Simón Iscariote, decidiera traicionar a Jesús.
En ese mismo instante, Satanás se metió en el corazón de Judas. Jesús le dijo: —Judas, date prisa en hacer lo que has planeado.
Dios le encargó que nos ayudara, y él obedeció, igual que Moisés también obedeció cuando Dios le ordenó ayudar a todo su pueblo.