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Génesis 13:2 - Biblia Lenguaje Básico

Para entonces Abrán ya era muy rico, pues tenía oro, plata y muchos ganados.

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Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Y Abram era riquísimo en ganado, en plata y en oro.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

(Abram era muy rico en ganado, plata y oro).

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Abram era muy rico, pues tenía animales, plata y oro.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y Abram era muy rico en ganado, en plata y en oro.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Era Abrán muy rico en ganado, en plata y en oro.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y Abram era riquísimo en ganado, en plata y en oro.

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Lòt tradiksyon



Génesis 13:2
17 Referans Kwoze  

Para quedar bien con Saray, el faraón trató amablemente a Abrán y le regaló ovejas, vacas, burros, burras, sirvientes, sirvientas y camellos.


Era tanto lo que Lot y Abrán tenían, que ya no podían vivir juntos en la misma región.


Abrahán ya era muy anciano, y Dios lo había bendecido en todo.


es muy rico; Dios le ha bendecido mucho y le ha dado ovejas, ganado, plata, oro, sirvientes, sirvientas, camellos y burros.


Llegó a tener tantas ovejas y vacas, y tantos sirvientes, que despertó la envidia de los filisteos.


Fue así como Jacob llegó a ser muy rico, pues tenía grandes rebaños, y también esclavos y esclavas, camellos y burros.


Tú siempre lo proteges a él y a su familia; cuidas todo lo que tiene, y bendices lo que hace. ¡Sus vacas y ovejas llenan la región!


La bendición de Dios es riqueza y está libre de preocupaciones.


Lo más importante es que reconozcáis a Dios como único rey, y que hagáis lo que él os pide. Todo lo demás, él os lo dará a su tiempo.


Más bien, debéis recordar que fue Dios quien os dio todo eso, y que lo hizo para cumplir la promesa que dio a vuestros antepasados.


El ejercicio físico no sirve para mucho; en cambio, es mucho mejor llevar una vida auténticamente religiosa, porque nos hace bien aquí en la tierra y también nos servirá para alcanzar el cielo. Esto es una verdad que podemos, y debemos creer.


Dios nos hace ricos y nos vuelve pobres; nos humilla y nos exalta.