Reconozco que he pecado y por eso he querido ser el primero de la casa de José en salir a recibirte.
2 Samuel 16:8 - Biblia Lenguaje Básico ¡Tú querías ser rey, y por eso mataste a los parientes de Saúl! Pero ahora Dios te castiga haciendo que sea rey tu hijo Absalón. ¡Eso es lo que mereces por asesino! Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Jehová te ha dado el pago de toda la sangre de la casa de Saúl, en lugar del cual tú has reinado, y Jehová ha entregado el reino en mano de tu hijo Absalón; y hete aquí sorprendido en tu maldad, porque eres hombre sanguinario. Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor te está pagando por todo el derramamiento de sangre en el clan de Saúl. Le robaste el trono, y ahora el Señor se lo ha dado a tu hijo Absalón. Al fin te van a pagar con la misma moneda, ¡porque eres un asesino! Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé ha hecho recaer sobre ti la sangre de la familia de Saúl; así como tú le quitaste el trono, así también ahora Yavé se lo da a tu hijo Absalón. Te ha venido la desgracia porque eres un sanguinario'. La Biblia Textual 3a Edicion YHVH ha hecho volver sobre ti toda la sangre derramada de la casa de Saúl, cuyo trono has usurpado, y YHVH ha entregado el reino en mano de tu hijo Absalón; y ¡hete ahí prendido° en tus maldades, porque eres un hombre sanguinario! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh ha hecho recaer sobre ti toda la sangre de la casa de Saúl, cuyo reino has usurpado, y Yahveh ha entregado el reino en manos de tu hijo Absalón. Ahora has caído en tu propia maldad, porque eres un hombre sanguinario'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Jehová te ha dado el pago de toda la sangre de la casa de Saúl, en lugar del cual tú has reinado; pero Jehová ha entregado el reino en mano de tu hijo Absalón; y he aquí, has sido tomado en tu maldad, porque eres hombre sanguinario. |
Reconozco que he pecado y por eso he querido ser el primero de la casa de José en salir a recibirte.
Durante el reinado de David hubo un hambre durante tres años. David preguntó a Dios por qué los trataba tan mal, y Dios le respondió: —La culpa es de Saúl y de su familia, pues él mató a muchos gabaonitas.
Los gabaonitas mataron a estos siete descendientes de Saúl al mismo tiempo. Los mataron en un monte, en presencia de Dios, mientras tenía lugar la siega de la cebada.
También está contigo Simí, el hijo de Guerá, de la tribu de Benjamín y natural de Bajurín. Él me maldijo de una manera terrible cuando yo iba a Majanáin. Pero después fue al río Jordán a recibirme y tuve que jurarle por Dios que no lo mataría.
Tú, Dios mío, eres mi defensor; ¡respóndeme cuando te llame! Siempre que tengo problemas me ayudas a salir de ellos; ¡compadécete de mí, y escucha mi oración!
¡Atiéndeme! ¡Respóndeme! Estoy angustiado, y no encuentro paz. Me asusta oír los gritos de los malvados enemigos que me oprimen. Me llenan de desgracias y me persiguen con ira.
Tus enemigos derramaron la sangre de tu pueblo santo y también de tus profetas. Por eso ahora tú les das a beber sangre. ¡Bien merecido lo tienen!
Así Abimélec recibió su merecido por haber matado a sus hermanos, y también los de Siquén fueron castigados por haberlo ayudado.