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1 Corintios 14:2 - Biblia Lenguaje Básico

Cuando habláis en un idioma extraño, os ayudáis solo a vosotros mismos. Es verdad que Dios os entiende, pues habláis de verdades secretas que solo el Espíritu Santo conoce. Pero aparte de él, nadie más sabe lo que decís. En cambio, cuando Dios os manda hablar de su parte, la gente sí os entiende. Además, así ayudáis a todos en la Iglesia a confiar más en Cristo, a sentirse mejor y a estar alegres.

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Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque por el Espíritu habla misterios.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Pues, si alguien tiene la capacidad de hablar en lenguas, le hablará solamente a Dios, dado que la gente no podrá entenderle. Hablará por el poder del Espíritu, pero todo será un misterio.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

El que habla en lenguas habla a Dios, pero no a los hombres, pues nadie le entiende cuando habla en espíritu y dice cosas misteriosas.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Porque el que habla en lenguas, no habla a los hombres, sino a Dios, pues nadie lo entiende, pues por el Espíritu habla misterios.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pues el que habla lenguas, no habla para los hombres, sino para Dios, ya que nadie lo entiende, aunque en espíritu hable misterios.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Porque el que habla en lengua desconocida, no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque en espíritu hable misterios.

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Lòt tradiksyon



1 Corintios 14:2
33 Referans Kwoze  

Así que voy a bajar y confundiré su idioma, para que no se puedan entender».


Como José estaba hablando con ellos por medio de un traductor, no se dieron cuenta de que él estaba entendiendo lo que hablaban.


Eliaquín, Sebná y Joaj dijeron al oficial asirio: —Por favor, no nos hables en hebreo. Háblanos en arameo, pues lo entendemos, y así no se enterarán todos los que nos están escuchando en la muralla.


Te hablaré por medio de ejemplos, y te explicaré los misterios del pasado.


Jesús les dijo: —A vosotros os he explicado los secretos del reino de Dios, pero no a los demás.


Los que crean en mí podrán hacer en mi nombre cosas maravillosas tales como expulsar demonios, hablar idiomas nuevos y extraños,


Jesús les respondió: —A vosotros os he explicado los secretos del reino de Dios, pero no a los demás. A ellos les enseño por medio de parábolas.


Y es que los oían hablar y alabar a Dios en un lenguaje misterioso.


Pablo puso sus manos sobre la cabeza de aquellos hombres, eran en total unas doce personas, y en ese momento, el Espíritu Santo vino sobre ellos. Entonces comenzaron a hablar en idiomas extraños y a transmitir mensajes de parte de Dios.


Los que me acompañaban vieron la luz, pero no oyeron la voz del que me hablaba.


Dios tiene poder para manteneros en la fe que yo os he proclamado al anunciar la buena noticia de Jesucristo. Esto va de acuerdo con el plan que Dios nos dio a conocer, y que mantuvo en secreto desde antes de crear el mundo.


Algunos reciben el poder de hacer milagros, y otros reciben la autoridad de hablar de parte de Dios. Unos tienen la capacidad de reconocer al Espíritu de Dios, y de descubrir los espíritus falsos. Algunos pueden hablar en un lenguaje misterioso y otros son capaces de entender lo que se dice en ese mensaje.


En la Iglesia, Dios le dio una función a cada una de las partes. En primer lugar, puso apóstoles; en segundo lugar, puso profetas, y en tercer lugar, maestros. También hay algunos que hacen milagros, y otros que tienen la capacidad de sanar a los enfermos; unos ayudan, otros dirigen, e incluso hay quienes hablan en un lenguaje misterioso.


Si no tengo amor, de nada me sirve hablar todas las lenguas del mundo y hasta el lenguaje de los ángeles. Si no tengo amor, soy como un trozo de metal que solo sirve para hacer ruido; ¡soy como una campana desafinada!


Si no tengo amor, de nada me sirve hablar de parte de Dios y conocer sus planes secretos. De nada me sirve que mi fe en él me haga mover montañas. Si no tengo amor, no soy nada.


Porque si tú das gracias a Dios movido por el Espíritu y te escucha un creyente no instruido, no podrá unirse a tu oración si no entiende lo que dices. Y no podrá hacerlo, porque no habrá comprendido nada.


Hermanos míos, cuando os reunáis, todo lo que hagáis debe ayudar a los demás. Unos pueden cantar, otros pueden enseñar o comunicar lo que Dios les haya mostrado, otros pueden hablar en un lenguaje misterioso, o interpretar lo que se dice con ese lenguaje.


Os voy a contar algo que Dios tenía en secreto: No todos moriremos, pero todos seremos transformados.


Dios nos dio a conocer todo esto por medio de su Espíritu, que lo examina todo, hasta los secretos más profundos de Dios.


Nosotros enseñamos el mensaje con palabras inteligentes, que vienen de Dios. Ese mensaje habla de los planes que tenía en secreto desde antes de crear el mundo, y que quiso mostrarnos para que podamos compartir su gloria.


Orad también por mí y pedidle a Dios que me dé el valor de anunciar con plena libertad el desconocido mensaje de la buena noticia.


Desde muy lejos Dios traerá contra vosotros un pueblo enemigo. Vendrá de un país que no conocéis y del que no entendéis su idioma. Se trata de un pueblo que ataca con gran rapidez, como el águila en vuelo.


Y lucho para animaros a todos y para que os mantengáis unidos en el amor de Cristo, y así lleguéis a entender la riqueza que lleva consigo entender todas las cosas y comprender plenamente el plan que Dios y Cristo habían mantenido en secreto;


No hay duda de que es muy profunda la verdad de la religión cristiana: Cristo vino al mundo como hombre, el Espíritu lo declaró inocente, los ángeles lo vieron. Su mensaje se anunció entre las naciones y el mundo creyó en él. Dios lo recibió en su gloria.


Además, deben mantener las verdades de la fe con una conciencia limpia.