Pusieron al frente de ellos capataces que los oprimiesen con trabajos forzados en la edificación de Pitón y Rameses, ciudades almacenes del Faraón.
Deuteronomio 26:6 - Biblia Martin Nieto Los egipcios nos maltrataron, nos oprimieron y nos impusieron una cruel esclavitud. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 y los egipcios nos maltrataron y nos afligieron, y pusieron sobre nosotros dura servidumbre. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando los egipcios nos oprimieron y nos humillaron al hacernos sus esclavos, Biblia Católica (Latinoamericana) Mi padre era un arameo errante, que bajó a Egipto y fue a refugiarse allí, siendo pocos aún; pero en ese país se hizo una nación grande y poderosa. Los egipcios nos maltrataron, nos oprimieron y nos impusieron dura servidumbre. La Biblia Textual 3a Edicion Pero los egipcios nos maltrataron y afligieron, y pusieron sobre nosotros una dura esclavitud. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Después los egipcios nos maltrataron, nos oprimieron y nos impusieron dura servidumbre. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y los egipcios nos maltrataron y nos afligieron, y pusieron sobre nosotros dura servidumbre. |
Pusieron al frente de ellos capataces que los oprimiesen con trabajos forzados en la edificación de Pitón y Rameses, ciudades almacenes del Faraón.
y amargando su vida con trabajos forzados: en la fabricación de mortero y ladrillos y en las diversas faenas del campo, trabajos a los que los sometían con dureza.
'Cuando asistáis en un parto a las hebreas, mirad el sexo; si es niño, matadlo; si es niña, dejadla vivir'.
Entonces el Faraón dio esta orden a todo el pueblo: 'Echad al río a todo varón que nazca, pero dejad vivir a las niñas'.
Surgió en Egipto un nuevo rey que no había conocido a José, y dijo a su pueblo:
Los inspectores de los israelitas se vieron en un aprieto porque se les dijo: 'No se disminuirá nada de vuestra tarea diaria de ladrillos'.
¿Por qué desde que fui al Faraón para hablarle en tu nombre trata él tan mal a este pueblo, y tú no haces nada para liberarlo?'.
Cargadlos de trabajo para que estén ocupados y no den oídos a esos embustes'.
Nuestros padres bajaron a Egipto, donde hemos estado largo tiempo, nosotros y nuestros padres, sufriendo malos tratos por parte de los egipcios.
Pero nosotros clamamos al Señor, Dios de nuestros padres, que escuchó nuestra plegaria, volvió su rostro hacia nuestra miseria, nuestros trabajos y nuestra opresión,
A vosotros, sin embargo, os tomó el Señor y os sacó del horno de Egipto para que fueseis el pueblo de su herencia hasta hoy.