Sobre ellos dejará caer una lluvia de brasas de fuego y de azufre encendido. ¡Un viento caliente los acabará!
Proverbios 22:5 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual La conducta de los malvados es una trampa para los demás; si te cuidas a ti mismo te apartarás de ella. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Espinos y lazos hay en el camino del perverso; El que guarda su alma se alejará de ellos. Biblia Nueva Traducción Viviente Los corruptos van por un camino espinoso y traicionero; el que aprecie la vida lo evitará. Biblia Católica (Latinoamericana) Hay espinas y trampas en el camino del perverso; el que se aleja de él se asegura. La Biblia Textual 3a Edicion Espinos y lazos hay en el camino de los perversos, El que guarda su alma se aparta de ellos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Espinas y trampas en la senda del perverso; quien estima su vida las evitará. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Espinas y lazos hay en el camino del perverso; el que guarda su alma se alejará de ellos. |
Sobre ellos dejará caer una lluvia de brasas de fuego y de azufre encendido. ¡Un viento caliente los acabará!
Vivamos bajo el cuidado del Dios altísimo; pasemos la noche bajo la protección del Dios todopoderoso.
El que da buenos consejos se gana el aprecio de todos, pero el que da malos consejos acabará en la ruina.
El que cuida lo que dice protege su vida; el que solo dice tonterías provoca su propia desgracia.
¡Qué difícil es la vida para el que es perezoso! ¡Y qué fácil es la vida para la persona honrada!
El que respeta una orden se respeta a sí mismo; el que deja de cumplirla dicta su sentencia de muerte.
El malvado cae en su propia trampa; pero el que es bueno vive con gran alegría.
La vida de los malvados es todo lo contrario: es como una gran oscuridad donde no saben ni en qué tropiezan.
De lo contrario, Dios no expulsará a estas naciones de delante de ustedes, sino que serán como una red o una trampa que los hará caer. Dios los usará como un látigo sobre las espaldas de ustedes, y como espinas en sus ojos. Y esto seguirá así, hasta que no quede ninguno de ustedes en esta tierra buena que nuestro Dios nos ha dado.
Sabemos que los hijos de Dios no pecan porque Jesucristo, el Hijo de Dios, los cuida, y el diablo no puede hacerles daño.