»Pero luego ellos se pusieron en tu contra. ¡Te insultaron gravemente! Desobedecieron tu ley, y mataron a tus profetas. Y los profetas solo les decían que debían arrepentirse y obedecer tu ley.
Marcos 10:5 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Entonces Jesús dijo: —Si Moisés les dejó escrito ese mandamiento, es porque ustedes son muy tercos. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y respondiendo Jesús, les dijo: Por la dureza de vuestro corazón os escribió este mandamiento; Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús les respondió: —Moisés escribió ese mandamiento solo como una concesión ante la dureza del corazón de ustedes, Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús les dijo: 'Moisés, al escribir esta ley, tomó en cuenta lo tercos que eran ustedes. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Jesús les dijo: Por la dureza de vuestro corazón os escribió este mandamiento, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces les replicó Jesús: 'Mirando a la dureza de vuestro corazón os escribió Moisés ese precepto. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jesús respondiendo, les dijo: Por la dureza de vuestro corazón os escribió este mandamiento, |
»Pero luego ellos se pusieron en tu contra. ¡Te insultaron gravemente! Desobedecieron tu ley, y mataron a tus profetas. Y los profetas solo les decían que debían arrepentirse y obedecer tu ley.
Jesús les respondió: —Moisés les permitió divorciarse porque ustedes son muy tercos y no quieren obedecer a Dios. Pero Dios, desde un principio, nunca ha querido que el hombre se separe de su esposa.
Antes de terminar su discurso, Esteban les dijo a los de la Junta Suprema: —¡Ustedes son muy tercos! ¡No entienden el mensaje de Dios! Son igual que sus antepasados. Siempre han desobedecido al Espíritu Santo.
Acerca del divorcio, Moisés dijo: «Si un hombre se casa, y más tarde encuentra en su esposa algo indecente, podrá divorciarse de ella. Para hacerlo, deberá entregarle una carta de divorcio y la despedirá de su casa.
pues los conozco muy bien. Yo sé que ustedes son tercos y rebeldes. Si ahora que estoy con ustedes desobedecen a Dios, ¿qué no harán cuando ya me haya muerto?
Una cosa debe quedar bien clara: si Dios les da esta buena tierra, no es porque ustedes sean muy buenos, pues en realidad son un pueblo muy terco.