Sin embargo, Abram le contestó: —Yo le he jurado al Dios altísimo, creador del cielo y de la tierra,
Jueces 5:19 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual »Luego, en Taanac, junto al arroyo Meguido, vinieron a pelear los reyes cananeos. Pero volvieron con las manos vacías. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Vinieron reyes y pelearon; Entonces pelearon los reyes de Canaán, En Taanac, junto a las aguas de Meguido, Mas no llevaron ganancia alguna de dinero. Biblia Nueva Traducción Viviente »Los reyes de Canaán llegaron y pelearon en Taanac, cerca de los manantiales de Meguido, pero no se llevaron tesoros de plata. Biblia Católica (Latinoamericana) Llegaron los reyes y combatieron. En Tanac, cerca de las aguas de Meguido, combatieron los reyes de Canaán, pero no recogieron botín. La Biblia Textual 3a Edicion Los reyes vinieron y guerrearon, Guerrearon los reyes de Canaán; En Taanac, junto a las aguas de Meguido; Pero no tomaron despojos de plata, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Llegaron los reyes, combatieron, entonces combatieron los reyes de Canaán en Taanac, junto a las aguas de Meguidó, sin poder recoger botín de plata. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Vinieron reyes y pelearon; entonces pelearon los reyes de Canaán en Taanac, junto a las aguas de Meguido, mas no llevaron ganancia alguna de dinero. |
Sin embargo, Abram le contestó: —Yo le he jurado al Dios altísimo, creador del cielo y de la tierra,
Así fue como Caín se apartó de la presencia de Dios y se fue a vivir al país de los vagabundos, al este del Edén.
Baaná hijo de Ahilud: gobernador de Taanac, Meguido y toda Bet-seán. Esta región está al lado de Saretán, al sur de Jezreel, y abarca desde Bet-seán hasta Abel-meholá, más allá de Jocmeam.
Pero Josías no se dio cuenta de que Dios le estaba hablando por medio de Necao. Así que se puso su armadura y fue a pelear contra Necao en el valle de Meguido.
Dentro del territorio de esas tribus había también varias ciudades con sus aldeas que pertenecían a Manasés. Estas son Bet-seán, Ibleam, Dor, Endor, Taanac y Meguido. La tercera ciudad mencionada es la de la costa.
Los espíritus malos reunieron a los reyes en un lugar, que en hebreo se llama Harmagedón.
Entonces vi al monstruo y a los reyes del mundo con sus ejércitos. Se habían reunido para pelear contra el que estaba montado en aquel caballo blanco, y contra su ejército.
Los de Manasés no pudieron echar a los que vivían en Bet-seán, Taanac, Dor, Ibleam y Meguido, ni tampoco a los de las aldeas vecinas. Así que los cananeos siguieron viviendo allí.
reunió a sus novecientos carros de hierro y a todos sus soldados. Salieron de Haróset-goím y marcharon hasta el arroyo Quisón.
“Seguramente se están repartiendo lo que ganaron en la guerra: Una o dos mujeres para cada capitán, telas de muchos colores para Sísara, uno o dos pañuelos bordados en colores para adornarse el cuello…”.