»No usen mi nombre sin el respeto que se merece. Si lo hacen, los castigaré.
Jeremías 34:16 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Pero después cambiaron de parecer y me ofendieron; volvieron a esclavizar a los mismos que ustedes ya habían puesto en libertad. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero os habéis vuelto y profanado mi nombre, y habéis vuelto a tomar cada uno a su siervo y cada uno a su sierva, que habíais dejado libres a su voluntad; y los habéis sujetado para que os sean siervos y siervas. Biblia Nueva Traducción Viviente Sin embargo, ahora ustedes abandonaron su juramento y profanaron mi nombre al volver a tomar a los hombres y a las mujeres que habían liberado y los obligaron a ser esclavos otra vez. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero ustedes se arrepintieron después y profanaron mi Nombre, pues cada uno fue a buscar a su esclavo o a su sirvienta para hacerlos esclavos de nuevo. La Biblia Textual 3a Edicion Pero os habéis vuelto y profanado mi Nombre, haciendo regresar cada uno a su siervo y cada uno a su sierva, a quienes habíais dejado ir libres a su voluntad, y los habéis reducido a servidumbre para que otra vez os sean siervos y siervas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero os habéis arrepentido, y así habéis profanado mi nombre, haciendo volver cada uno a su esclavo y a su esclava, a los que habíais dejado libres según su deseo, y los habéis reducido de nuevo a esclavitud'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero os habéis vuelto y profanado mi nombre, y habéis vuelto a tomar cada uno a su siervo y cada uno a su sierva, que habíais dejado libres a su voluntad; y los habéis sujetado para que os sean siervos y siervas. |
»No usen mi nombre sin el respeto que se merece. Si lo hacen, los castigaré.
”Ustedes han actuado en contra de mi voluntad. Con sus mentiras, han afligido a la gente buena; en cambio, han animado a la gente mala para que siga portándose mal, y no se salven de mi castigo.
»Pero si la persona justa deja de hacer lo bueno y comienza a comportarse como un malvado, y hace cosas malas y repugnantes, no esperen que yo la deje seguir viviendo. Al contrario, no tomaré en cuenta sus buenas acciones, y morirá por culpa de sus pecados y por desobedecerme.
”¡Israelitas! Yo soy su Dios. Si no quieren obedecerme, ¡entonces sigan adorando a sus ídolos malolientes! Pero llegará el día en que tendrán que obedecerme y no dejaré que me falten al respeto presentando esas ofrendas a sus ídolos.
»Puede ser que una persona buena deje de hacer el bien y haga lo malo. Si yo la pongo en peligro de muerte, y tú no se lo adviertes, morirá por causa de su pecado, y no tomaré en cuenta lo bueno que haya hecho antes. Pero el culpable de su muerte serás tú.
ni usen mi nombre para prometer algo que no van a cumplir. Yo soy el Dios de Israel.
Pero ustedes los sacerdotes hacen todo lo contrario: me faltan al respeto, y desprecian mi altar y las ofrendas que allí se me presentan».
«Saúl no me hace caso ni me obedece. ¡Lamento haberlo hecho rey!» Al oír esto, Samuel se preocupó mucho y se pasó toda la noche rogándole a Dios que perdonara a Saúl.