Los habitantes de Israel y Judá eran tantos como la arena del mar, que no se puede contar. Tenían comida y bebida de sobra, y eran muy felices.
Génesis 49:11 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Sus ojos son más oscuros que el vino; sus dientes son más blancos que la leche. Atará su burro, a la mejor rama del viñedo, y sin quitarse la ropa se empapará en ríos de vino. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Atando a la vid su pollino, Y a la cepa el hijo de su asna, Lavó en el vino su vestido, Y en la sangre de uvas su manto. Biblia Nueva Traducción Viviente Él ata su potro a una vid, la cría de su burro a una vid escogida. Lava sus ropas en vino, sus vestidos, con el jugo de las uvas. Biblia Católica (Latinoamericana) Amarra en la vid a su burrito, y a la cepa el hijito de su burra. Lava en el vino su túnica y en la sangre de los racimos su manto. La Biblia Textual 3a Edicion Ata a la vid su pollino, Y a la cepa el hijo de su asna. Lava en el vino su vestido, Y en sangre de uvas su manto. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ata a la vid su pollino, a la cepa el hijo del asna; lava su vestido en el vino, en la sangre de las uvas su ropa. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Atando a la vid su pollino, y a la cepa el hijo de su asna, lavó en el vino su vestidura, y en la sangre de uvas su manto: |
Los habitantes de Israel y Judá eran tantos como la arena del mar, que no se puede contar. Tenían comida y bebida de sobra, y eran muy felices.
25 (5.5) Durante el reinado de Salomón todas las familias de Israel y Judá vivieron con tranquilidad, paz y seguridad, desde Dan hasta Beerseba. Cultivaban huertos, viñas e higueras.
Después los llevaré a un país parecido al de ustedes, donde hay trigo, viñedos, olivos y miel. Allí podrán vivir bien y no morirán. No escuchen a Ezequías, pues él los engaña al decirles que Dios los va a salvar.
18 (4.18) »Cuando llegue ese día, en los cerros y en las colinas habrá vino y leche en abundancia; y nunca faltará el agua en los arroyos de Judá, pues del templo saldrá un manantial que regará el valle de Sitim.
»Ya está cerca el día en que tendrán abundantes cosechas. No habrán terminado de cosechar el trigo cuando tendrán que volver a sembrar; no habrán acabado de preparar el vino cuando tendrán que plantar más viñas. »¡En los cerros y en las colinas correrá el vino como un río!
»Todo el mundo vivirá tranquilo bajo la sombra de su viña, o a la sombra de su higuera, porque así Dios lo ha prometido.
De sus vacas, cabras y ovejas sacaron leche y cuajada; en su mesa se sirvió carne del mejor ganado. Comieron pan del mejor trigo y vino de las mejores uvas.
»Miren que Dios les está dando una tierra excelente, llena de arroyos, fuentes y manantiales que brotan de los valles y las montañas.
Esa tierra produce trigo, cebada, higos, uvas, granados y aceitunas, y hay también mucho aceite y mucha miel.
Las uvas fueron exprimidas fuera de la ciudad, y del recipiente salió tanta sangre que subió hasta un metro y medio de altura, en una extensión de trescientos kilómetros.
Comerán carne de reyes, de jefes militares y de valientes guerreros. También comerán la carne de los caballos y de sus jinetes; comerán carne de toda clase: de gente libre y de esclavos, de gente importante y de gente poco importante.»
Yo le respondí: —Señor, usted lo sabe. Y él me dijo: —Son los que no murieron durante el tiempo de gran sufrimiento que hubo en la tierra. Ellos confiaron en Dios, y él les perdonó sus pecados por medio de la muerte del Cordero.