Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




Génesis 35:4 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

Ellos le entregaron a Jacob todos aquellos dioses, y también los aretes que llevaban como amuletos. Entonces Jacob los enterró bajo el gran árbol que está en Siquem.

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Así dieron a Jacob todos los dioses ajenos que había en poder de ellos, y los zarcillos que estaban en sus orejas; y Jacob los escondió debajo de una encina que estaba junto a Siquem.

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces le entregaron a Jacob todos los ídolos paganos que conservaban y también los aretes, y él los enterró bajo el gran árbol que está cerca de Siquem.

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

Entregaron a Jacob todos los dioses extraños que tenían consigo, así como los aros de las orejas, y Jacob los enterró bajo una encina que hay junto a Siquem;'

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

Le dieron, pues, a Jacob todos los dioses extraños que tenían en su mano, y los zarcillos° que tenían en sus orejas, y Jacob los enterró bajo la encina° que había junto a Siquem.°

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Entregaron a Jacob todos los dioses extranjeros que tenían en su poder y los pendientes de sus orejas y Jacob los enterró al pie de la encina que hay en Siquén.

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Así dieron a Jacob todos los dioses ajenos que había en poder de ellos, y los zarcillos que estaban en sus orejas; y Jacob los escondió debajo de una encina, que estaba junto a Siquem.

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



Génesis 35:4
13 Referans Kwoze  

En aquel tiempo, los cananeos todavía ocupaban la región de Canaán. Abram recorrió toda esa región, y llegó a Siquem, donde está el árbol de Moré.


porque debemos ir a Betel para presentarnos ante Dios. Allá construiré un altar, para darle gracias, pues cuando estuve en problemas, él me ayudó. Por dondequiera que he andado, Dios siempre ha estado conmigo».


Y cuando se pusieron en marcha, Dios hizo que todas las ciudades vecinas les tuvieran miedo, así que nadie los persiguió.


Luego fue y echó el toro al fuego, lo molió hasta hacerlo polvo, y mezcló el polvo con el agua. Entonces les dijo a los israelitas: «¡Ahora, beban!»


Ustedes llegarán a ver como basura sus ídolos de oro y plata.


13 (15) »Cuando visita a sus amantes se pone joyas y les lleva regalos, pero a mí me tiene olvidado. Por eso la voy a castigar, pues ha adorado a dioses falsos. »Yo soy el Dios de Israel, y les juro que así lo haré.


»Cuando ustedes hayan derrotado a esos pueblos, deberán quemar las imágenes de sus ídolos. Así no caerán en la tentación de quedarse con el oro y la plata que los recubre. Eso es algo que a Dios no le gusta.


»Lo que ustedes deben hacer es derribar los altares de esa gente y destruir y quemar los ídolos que adoran, especialmente las imágenes de la diosa Astarté.


Entonces toda la gente de Siquem se reunió con la de Bet-miló, junto al roble sagrado que está en Siquem, y nombraron rey a Abimélec.