Luego de pelar las ramas, las puso frente a todos los bebederos, para que las ovejas las vieran cuando vinieran a beber. Y así, cuando las ovejas en celo venían a beber,
Génesis 30:39 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual se apareaban frente a las ramas y tenían crías con piel rayada y manchada. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Así concebían las ovejas delante de las varas; y parían borregos listados, pintados y salpicados de diversos colores. Biblia Nueva Traducción Viviente y cuando se apareaban frente a las ramas peladas con rayas blancas, tenían crías rayadas, manchadas y moteadas. Biblia Católica (Latinoamericana) Y las que se apareaban frente a las varas parían después crías rayadas, moteadas y manchadas. La Biblia Textual 3a Edicion Así el rebaño se encelaba delante de las varas y parían borregos listados, moteados y manchados. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se apareaba el ganado a la vista de las varas y parían crías listadas, moteadas y manchadas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y concebían las ovejas delante de las varas, y parían borregos listados, pintados y salpicados de diversos colores. |
Luego de pelar las ramas, las puso frente a todos los bebederos, para que las ovejas las vieran cuando vinieran a beber. Y así, cuando las ovejas en celo venían a beber,
Jacob ponía estas crías aparte, y el resto del rebaño lo ponía frente a los animales rayados y de color oscuro que había dejado Labán. Y así fue formando sus rebaños, sin mezclarlos con los de Labán.
»En los veinte años que he vivido contigo, jamás me comí un solo carnero de tus rebaños, ni tus ovejas ni tus cabras perdieron sus crías.
Los veinte años que viví en tu casa los pasé en las peores condiciones: ahogándome de calor en el día, y muriéndome de frío en la noche, ¡y hasta el sueño se me iba! Catorce años trabajé para ti por tus dos hijas, y seis años por tus rebaños, ¡y más de una vez me rebajaste el sueldo!
¡Qué bueno que el Dios de mi abuelo Abraham me brindó su ayuda! El Dios de mi padre Isaac fue bueno conmigo, pues me vio cansado y afligido, y anoche te reprendió. Si Dios no lo hubiera hecho, tú me habrías despedido sin nada.
Al contrario, si Labán decidía pagarme con animales manchados, todos los rebaños tenían crías manchadas. Y si decidía pagarme con animales rayados, todos los rebaños tenían crías rayadas.