Al oír esto, el mayordomo se inclinó hasta el suelo y dio gracias a Dios;
Génesis 24:48 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual luego me incliné para adorar y bendecir al Dios de mi amo Abraham, pues me guio directamente hasta la nieta del hermano de mi amo, para tomarla como esposa para su hijo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 y me incliné y adoré a Jehová, y bendije a Jehová Dios de mi señor Abraham, que me había guiado por camino de verdad para tomar la hija del hermano de mi señor para su hijo. Biblia Nueva Traducción Viviente »Después me incliné hasta el suelo y adoré al Señor. Alabé al Señor, Dios de mi amo, Abraham, porque me había guiado directamente a la sobrina de mi amo, para que ella sea la esposa de su hijo. Biblia Católica (Latinoamericana) e hincándome de rodillas, adoré a Yavé, bendiciendo al Dios de mi patrón Abrahán, que me había conducido por el buen camino para conseguir para su hijo a la hija del hermano de mi patrón. La Biblia Textual 3a Edicion E hice reverencia y me postré ante YHVH, y bendije a YHVH, Dios de mi señor Abraham, que me había conducido por camino recto a fin de tomar a la hija° del hermano de mi señor para su hijo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Después me postré y adoré a Yahveh, y bendije a Yahveh, Dios de mi amo Abrahán, que me había guiado por el camino recto para tomar a la hija del hermano de mi señor para su hijo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y me incliné, y adoré a Jehová, y bendije a Jehová Dios de mi señor Abraham, que me había guiado por camino de verdad para tomar la hija del hermano de mi señor para su hijo. |
Al oír esto, el mayordomo se inclinó hasta el suelo y dio gracias a Dios;
Después de esto nos reunimos junto al río de Ahavá, y allí mismo ordené que hiciéramos un ayuno para humillarnos ante nuestro Dios, y así pedirle que protegiera a nuestras familias y pertenencias durante el regreso a Jerusalén.
Tú me dijiste: «Yo te voy a instruir; te voy a enseñar cómo debes portarte. Voy a darte buenos consejos y a cuidar siempre de ti.
14 (15) ¡Este es nuestro Dios! ¡Nuestro Dios es un Dios eterno que siempre guiará nuestra vida!
Al pueblo debes enseñarle los mandamientos de Dios, y enseñarle también a comportarse y a cumplir sus obligaciones.
Yo, como maestro, te enseño a vivir sabiamente y a siempre hacer el bien.
Dios, el Salvador y santo de Israel, continuó diciendo: «Israel, yo soy tu Dios, que te enseña lo bueno y te dice lo que debes hacer.