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Génesis 18:23 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

y acercándose a él le dijo: —No me digas que vas a matar a los buenos junto con los malos.

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Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Y se acercó Abraham y dijo: ¿Destruirás también al justo con el impío?

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Abraham se le acercó y dijo: —¿Destruirás tanto al justo como al malvado?

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Se acercó entonces Abrahán y le dijo: '¿Es cierto que vas a exterminar al justo junto con el malvado?'

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La Biblia Textual 3a Edicion

Entonces, acercándose, Abraham dijo: ¿Destruirás al justo con el malvado?

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Se acercó entonces Abrahán y le dijo: '¿Es que de verdad vas a exterminar al justo con el pecador?

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y se acercó Abraham y dijo: ¿Destruirás también al justo con el impío?

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Lòt tradiksyon



Génesis 18:23
15 Referans Kwoze  

Supongamos que en la ciudad se encuentran cincuenta personas buenas. ¿No perdonarías, por esas cincuenta personas, a todos los que allí viven?


¡Tú eres el juez de toda la tierra! ¡Tú no puedes matar a los que hacen lo bueno junto con los que hacen lo malo! ¡Tú eres un Dios justo!


Pero Abimélec ni siquiera se había acercado a ella, así que respondió: —Dios mío, ¿cómo vas a destruir a un pueblo inocente?


Si Dios no amara la justicia, no podría gobernar el mundo. Así que no puedes condenar al Dios justo y poderoso.


El Dios todopoderoso nunca hace nada injusto.


Pero yo estaré cerca de ti, que es lo que más me gusta. Tú eres mi Dios y mi dueño, en ti encuentro protección; ¡por eso quiero contar todo lo que has hecho!


»No acusen a una persona diciendo mentiras, ni condenen a muerte a la gente inocente y honesta, porque yo no consideraré inocente al culpable.


Del mismo pueblo saldrá su rey, a quien permitiré estar en mi presencia, aunque no a todos se lo permito.


Moisés y Aarón se tiraron de cara al suelo, y le dijeron a Dios: —Dios mío, tú que nos das vida a todos, ¡no los mates! ¿Vas a destruirlos por culpa de un solo hombre?


Por eso, mantengamos una amistad sincera con Dios, teniendo la plena seguridad de que podemos confiar en él. Porque Cristo nos dejó limpios de pecado, como si nos hubiera lavado con agua pura, y ya estamos libres de culpa.


Por eso, confiesen sus pecados unos a otros, y oren unos por otros, para que Dios los sane. La oración de una persona buena es muy poderosa, porque Dios la escucha.


Por ejemplo, el profeta Elías era en todo igual a todos nosotros; pero le pidió a Dios con mucha confianza que no lloviera, ¡y durante tres años y medio no llovió sobre la tierra!