Una vez que terminó con todo esto, Moisés colgó la cortina de la entrada del santuario,
Puso asimismo la cortina a la entrada del tabernáculo.
Después colgó la cortina a la entrada del tabernáculo,
A la entrada de la Morada colocó la cortina, y en la misma entrada de la Morada colocó también el altar de los holocaustos,
Luego colocó la cortina para la entrada del Tabernáculo,
Colocó el cortinaje a la entrada del santuario.
Puso asimismo la cortina de la puerta del tabernáculo.
Siguiendo las instrucciones que Dios le había dado, Moisés quemó allí incienso perfumado.
colocó frente a ella el altar para los sacrificios quemados, y en él quemó como ofrenda animales y cereales, tal como Dios se lo había ordenado.
El altar de oro para quemar incienso lo colocarás frente al cofre del pacto, y luego colgarás la cortina que va a la entrada del santuario.
Yo soy la puerta del reino de Dios: cualquiera que entre por esta puerta, se salvará; podrá salir y entrar, y siempre encontrará alimento.
Jesús le respondió: —Yo soy el camino, la verdad y la vida. Sin mí, nadie puede llegar a Dios el Padre.
Por medio de lo que Jesucristo hizo, tanto los judíos como los no judíos tenemos un mismo Espíritu, y podemos acercarnos a Dios el Padre.