30 (31) y por eso Jacob llamó a ese lugar Penuel, pues dijo: «¡He visto a Dios cara a cara, y todavía sigo con vida!»
Éxodo 33:11 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Siempre que Moisés entraba en la Carpa comunitaria, hablaba con Dios personalmente, como si hablara con un amigo. Después, Moisés regresaba al campamento. Pero Josué, que era su ayudante, nunca se alejaba de la carpa. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y hablaba Jehová a Moisés cara a cara, como habla cualquiera a su compañero. Y él volvía al campamento; pero el joven Josué hijo de Nun, su servidor, nunca se apartaba de en medio del tabernáculo. Biblia Nueva Traducción Viviente Dentro de la carpa de reunión, el Señor hablaba con Moisés cara a cara, como cuando alguien habla con un amigo. Después, Moisés regresaba al campamento, mientras que su asistente, el joven Josué, hijo de Nun, permanecía en la carpa de reunión. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé hablaba con Moisés, cara a cara, como habla un hombre con su prójimo. Después Moisés volvía al campamento, pero su ayudante, el joven Josué, hijo de Nun, no se alejaba de la Tienda. La Biblia Textual 3a Edicion Y YHVH hablaba con Moisés cara a cara, como un hombre suele hablar con su amigo. Luego volvía al campamento, pero el joven Josué ben Nun nunca se apartaba de en medio de la Tienda. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh hablaba a Moisés cara a cara, como habla un hombre con su amigo. Después Moisés volvía al campamento, pero su ayudante, el joven Josué, hijo de Nun, no se apartaba del interior de la tienda. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová hablaba a Moisés cara a cara, como habla cualquiera a su compañero. Y él volvía al campamento; mas el joven Josué, su criado, hijo de Nun, no se apartaba de en medio del tabernáculo. |
30 (31) y por eso Jacob llamó a ese lugar Penuel, pues dijo: «¡He visto a Dios cara a cara, y todavía sigo con vida!»
»Dios nuestro, tú expulsaste a los pueblos que antes vivían en este territorio, y nos lo diste a nosotros, que somos descendientes de tu amigo Abraham.
Allí Moisés le dijo a Josué: «Elige a algunos hombres, y sal a pelear contra los amalecitas. Mañana yo estaré en lo alto del cerro, sosteniendo en la mano la vara que Dios me dio para castigar a los egipcios».
Cuando Josué oyó los gritos de la gente, le dijo a Moisés: —Se oyen gritos de guerra en el campamento.
Tan pronto como Moisés entraba, la columna de nube bajaba y se colocaba a la entrada; entonces todos se arrodillaban a la entrada de su propia tienda de campaña, mientras Dios hablaba con Moisés.
»Yo soy el Dios todopoderoso. Ese es mi nombre. No permito que otros dioses reciban la honra y la alabanza que solo yo merezco recibir.
Josué, que desde joven era ayudante de Moisés, estaba allí. Al oír al muchacho, dijo: —Moisés, mi señor, ¡no los deje usted profetizar!
»En una boda, el que se casa es el novio, y el mejor amigo del novio se llena de alegría con solo escuchar su voz. Así de alegre estoy ahora, porque el Mesías está aquí.
Después de esto, Dios le dijo a Moisés: «Ya se acerca el día de tu muerte. Por eso quiero que tú y Josué vengan al santuario, para que yo les diga lo que deben hacer». Moisés y Josué fueron al santuario,
Nunca más hubo en Israel un profeta como Moisés, que hablara con Dios cara a cara.
Así se cumplió lo que dice en la Biblia: «Abraham confió en la promesa de Dios, y por eso Dios lo aceptó». Fue así como Abraham se hizo amigo de Dios.