Para quedar bien con Abram, el rey le regaló ovejas, vacas, burros, burras, sirvientes, sirvientas y camellos.
Eclesiastés 5:11 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual 11 (10) porque quien se llena de dinero también se llena de gente que quiere gastarlo. Lo único que sacan los ricos es el gusto de ver tanto dinero, Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Cuando aumentan los bienes, también aumentan los que los consumen. ¿Qué bien, pues, tendrá su dueño, sino verlos con sus ojos? Biblia Nueva Traducción Viviente Cuanto más tengas, más se te acercará la gente para ayudarte a gastarlo. Por lo tanto, ¿de qué sirven las riquezas? ¡Quizás solo para ver cómo se escapan de las manos! Biblia Católica (Latinoamericana) El sueño del trabajador será tranquilo, haya comido poco o mucho; pero la saciedad del rico no le permite dormir. La Biblia Textual 3a Edicion Cuando aumentan los bienes, aumentan quienes los consumen. ¿Qué provecho, pues, tendrá su dueño aparte de verlos con sus propios ojos? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dulce es el sueño para quien trabaja, coma poco o mucho; pero al rico, el hartazgo no le deja dormir. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Cuando los bienes aumentan, también aumentan los que los consumen. ¿Qué bien, pues, tendrá su dueño, sino verlos con sus ojos? |
Para quedar bien con Abram, el rey le regaló ovejas, vacas, burros, burras, sirvientes, sirvientas y camellos.
pues son como las águilas: abren las alas y salen volando. Si acaso llegas a verlas, muy pronto desaparecen.
Alégrate ahora que eres joven. Déjate llevar por lo que tus ojos ven y por lo que tu corazón desea, pero no olvides que un día Dios te llamará a cuentas por todo lo que hagas.
Entre los que reinaron en Jerusalén antes que yo, nunca nadie fue tan importante ni tan sabio.
12 (11) porque de tanto tener hasta el sueño se les quita. En cambio, la gente que trabaja puede comer mucho o comer poco, pero siempre duerme tranquila.
Por eso, «vale más pájaro en mano que cien volando». Aunque tampoco esto tiene sentido, porque es como querer atrapar el viento.
”Los que se vuelven ricos haciendo trampa, perderán sus riquezas y, cuando menos lo esperen, acabarán en la miseria”».
Pero yo soy el Dios de Israel, y de nada va a servirte todo lo que has hecho; yo lo quemaré por completo.
Las cosas que ofrece la gente del mundo no vienen de Dios, sino de los pecadores de este mundo. Y estas son las cosas que el mundo nos ofrece: los malos deseos, la ambición de tener todo lo que vemos, y el orgullo de poseer muchas riquezas.