por lo que Abram le dijo a Lot: «Tú y yo no debemos pelearnos, ni tampoco mis pastores y tus pastores, pues somos parientes.
2 Crónicas 11:4 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual “Dios no quiere que haya guerra contra las demás tribus de Israel, pues ellos son sus parientes. Vuelvan a sus casas, pues es una orden de Dios”». Al escuchar este mensaje, todos regresaron a sus casas y no atacaron a Jeroboam. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Así ha dicho Jehová: No subáis, ni peleéis contra vuestros hermanos; vuélvase cada uno a su casa, porque yo he hecho esto. Y ellos oyeron la palabra de Jehová y se volvieron, y no fueron contra Jeroboam. Biblia Nueva Traducción Viviente “Esto dice el Señor: ‘No peleen contra sus parientes. ¡Regrese cada uno a su casa, porque lo que ha sucedido es obra mía!’”». Entonces ellos obedecieron el mensaje del Señor y no pelearon contra Jeroboam. Biblia Católica (Latinoamericana) No suban a combatir con sus hermanos; que cada uno se vuelva a su casa porque estos acontecimientos vienen de mí. Ellos escucharon la palabra de Yavé y abandonaron sus propósitos de marchar contra Jeroboam. La Biblia Textual 3a Edicion Así dice YHVH: No subiréis ni lucharéis contra vuestros hermanos. Cada uno vuelva a su casa, porque esto proviene de mí. Y ellos escucharon las palabras de YHVH, y se volvieron, y no fueron contra Jeroboam.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 'Así habla Yahveh: no subáis a combatir contra vuestros hermanos. Vuélvase cada uno a su casa, porque de mí proviene esto''. Obedecieron ellos la intimación de Yahveh y desistieron de marchar contra Jeroboán. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Así dice Jehová: No subáis ni peleéis contra vuestros hermanos; vuélvase cada uno a su casa, porque yo he hecho esto. Y ellos oyeron la palabra de Jehová, y se volvieron, y no fueron contra Jeroboam. |
por lo que Abram le dijo a Lot: «Tú y yo no debemos pelearnos, ni tampoco mis pastores y tus pastores, pues somos parientes.
Pero Abner le gritó a Joab: —Ya no nos matemos unos a otros. Ordénales a tus soldados que dejen de perseguirnos. Al fin de cuentas, somos hermanos, y lo único que vamos a sacar de todo esto es dolor y tristeza.
Al anochecer, se corrió la voz en todo el ejército: «¡El rey ha muerto! ¡Cada uno regrese a su ciudad y a su tierra!» Después llevaron el cuerpo del rey a Samaria y lo enterraron allí.
«Debes darle a Roboam, y a todos los de la tribu de Judá y de Benjamín, este mensaje:
Cuando eligieron a sus reyes, no me tomaron en cuenta; cuando nombraron a sus jefes, no me pidieron consejo; ¡ellos mismos se hicieron daño al fabricarse ídolos de oro y plata!
Al día siguiente, Moisés vio que dos israelitas se estaban peleando. Trató de calmarlos y les dijo: “Ustedes son de la misma nación. ¿Por qué se pelean?”
En fin, todos ustedes deben vivir en armonía y amarse unos a otros. Pónganse de acuerdo en todo, para que permanezcan unidos. Sean buenos y humildes.