Al segundo año de Asa, rey de Judá, empezó a reinar en Israel Nadab, hijo de Jeroboam, y tuvo dos años la corona.
Proverbios 28:2 - Biblia Torres Amat 1825 Por los pecados de la tierra hay muchos príncipes en ella de corto reinado; pero será más larga la vida del príncipe, si es sabio, y adquiere la inteligencia de las cosas que aquí se enseñan. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Por la rebelión de la tierra sus príncipes son muchos; Mas por el hombre entendido y sabio permanece estable. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando hay corrupción moral en una nación, su gobierno se desmorona fácilmente. En cambio, con líderes sabios y entendidos viene la estabilidad. Biblia Católica (Latinoamericana) Los errores de un violento ponen al mundo en ebullición, con un hombre inteligente vuelve la calma. La Biblia Textual 3a Edicion Por la rebelión de la tierra sus príncipes son muchos, Pero por el hombre entendido y sabio permanece estable. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por culpa de los violentos surgen las reyertas; pero el hombre prudente las extingue. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por la transgresión de la tierra sus príncipes son muchos: Mas por el hombre entendido y sabio permanecerá estable. |
Al segundo año de Asa, rey de Judá, empezó a reinar en Israel Nadab, hijo de Jeroboam, y tuvo dos años la corona.
Lo mató, pues, Baasa, el año tercero de Asa, rey de Judá, y reinó en su lugar.
Por la bendición de los justos será ensalzada la ciudad; mas por la lengua de los impíos quedará arruinada.
Se halló dentro un hombre pobre, pero muy sabio, que con su saber libertó la ciudad; mas luego nadie se acordó de él.
Estos lugares desiertos desde muchísimo tiempo, serán por ti poblados, alzarán los cimientos que han de durar de generación en generación; y te llamarán el restaurador de los muros, y el que haces seguros los caminos.
Por tanto, toma, ¡oh rey!, mi consejo, y redime con limosnas tus pecados y maldades, ejercitando la misericordia con los pobres; que tal vez perdonará el Señor tus pecados.
En medio de mi indignación te concedí un rey; y en medio de mi enojo te lo quitaré.