Porque ha obrado dolosamente en la divina presencia; por lo cual se ha hecho más odiosa su maldad.
Proverbios 16:2 - Biblia Torres Amat 1825 Todas las acciones del hombre están patentes a la humana vista; mas el Señor pesa los espíritus o juzga los interiores. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Todos los caminos del hombre son limpios en su propia opinión; Pero Jehová pesa los espíritus. Biblia Nueva Traducción Viviente La gente puede considerarse pura según su propia opinión, pero el Señor examina sus intenciones. Biblia Católica (Latinoamericana) Cada cual justifica sus decisiones, pero Yavé sopesa los espíritus. La Biblia Textual 3a Edicion Todos los caminos del hombre son limpios en su propia opinión, Pero YHVH pesa los espíritus. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El hombre piensa que su conducta es recta; pero es Yahveh quien escruta los espíritus. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Todos los caminos del hombre son limpios ante sus propios ojos; pero Jehová pesa los espíritus. |
Porque ha obrado dolosamente en la divina presencia; por lo cual se ha hecho más odiosa su maldad.
Al necio se le figura acertado su proceder; pero el sabio toma los consejos de otro.
Un camino hay que al hombre le parece recto; pero su paradero es la muerte.
Como la plata se prueba en la fragua, y el oro en el crisol, así prueba el Señor los corazones con la tribulación.
Le parecen rectos al hombre todos sus procederes; pero el Señor examina los corazones.
Si dijeres: no alcanza a ello mis fuerzas, sábete que aquel que ve los corazones, lo conoce bien; y nada se le pasa por alto al salvador de tu alma, el cual ha de remunerar al hombre según sus obras.
Otra casta de gente que se tiene por pura, y por lo mismo no se ha lavado de sus manchas.
El Señor está mirando atentamente los caminos del hombre, y nota todos sus pasos.
Y andando por la senda de tus juicios o leyes, hemos puesto en ti, ¡oh Señor!, nuestra confianza: Todo el deseo de nuestra alma se cifra en traer a la memoria tu Nombre.
Yo el Señor soy el que escudriña los corazones, y el que examina los afectos de ellos, y doy a cada uno la paga según su proceder y conforme al mérito de sus obras.
Y el ángel le dijo: ¿Por qué das de palos por tercera vez a tu borrica? Yo he venido para oponerme a ti; porque tu idea es perversa y contraria a mí.
Mas Jesús les dijo: Vosotros os vendéis por justos delante de los hombres; pero Dios conoce vuestros corazones; porque lo que parece sublime a los ojos humanos, a los de Dios es abominable.
Conozco tus obras, y tu fe, y caridad, y tus servicios, y paciencia, y que tus obras o virtudes últimas son muy superiores a las primeras.
y a los demás que habitáis en Tiatira: A cuantos no siguen esta doctrina, y no han conocido las honduras de Satanás, o las profundidades, como ellos llaman, yo no echaré sobre vosotros otra carga;
En aquellos días no había rey o magistrado supremo en Israel; sino que cada cual practicaba lo que le parecía mejor.
Fueron, pues, los que bebieron el agua, llevándola a su boca con la mano, trescientos hombres: todo el resto de la tropa había doblado sus rodillas para beber más cómodamente.
Respondió el Señor a Samuel: No mires a su buena presencia, ni a su grande estatura; porque no es ése el que he escogido; y yo no juzgo por lo que aparece a la vista del hombre; pues el hombre no ve más que lo exterior; mas el Señor ve en el fondo del corazón.
Cesad, pues, de hablar con soberbia y jactancia; no uséis ya de aquel vuestro antiguo lenguaje, porque Dios, que todo lo sabe, él solo es el Señor, y él lleva a efecto sus altísimos designios.