Te ensalzaré, ¡oh Dios y rey mío!, y bendeciré, y cantaré alabanzas a tu Nombre desde ahora, y por los siglos de los siglos.
Proverbios 1:23 - Biblia Torres Amat 1825 Convertíos a la fuerza de mis reprensiones; mirad que os comunicaré mi espíritu y os enseñaré mi doctrina. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Volveos a mi reprensión; He aquí yo derramaré mi espíritu sobre vosotros, Y os haré saber mis palabras. Biblia Nueva Traducción Viviente Vengan y escuchen mi consejo. Les abriré mi corazón y los haré sabios. Biblia Católica (Latinoamericana) Oigan pues mis advertencias, en este momento en que abro mi corazón y les doy a conocer mis pensamientos. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Volveos ante mi reprensión, Y os manifestaré mi espíritu, Y os haré conocer mis palabras! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Atended mis advertencias; mirad que os abro mi espíritu, os doy a conocer mis palabras. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Volveos a mi reprensión: He aquí, yo derramaré mi espíritu sobre vosotros, y os daré a conocer mis palabras. |
Te ensalzaré, ¡oh Dios y rey mío!, y bendeciré, y cantaré alabanzas a tu Nombre desde ahora, y por los siglos de los siglos.
menospreciasteis todos mis consejos, y ningún caso hicisteis de mis reprensiones,
Quien recibe la corrección, va por el camino de la vida; quien no hace caso de ella, descarriado anda.
Quien ama la corrección, ama la ciencia; mas el que aborrece las reprensiones, es un insensato.
Al hombre de dura cerviz, que desprecia al que le corrige, le sorprenderá de repente su total ruina, y no tendrá remedio.
pues el mandamiento de tu padre es a manera de antorcha, y la ley o instrucciones de tu madre como una luz, y la corrección que conserva a los jóvenes en la disciplina, es el camino de la vida,
Y la equidad o la virtud habitará entonces en el desierto y fijará su morada en el nuevo Carmelo la justicia o santidad.
¡Desdichado aquel que disputa contra su hacedor no siendo más que una vasija de tierra o arcilla de Samos! Acaso dirá el barro al alfarero: ¿Qué haces?, ¿no ves que tu labor no tiene la perfección del arte?
Convertíos a mí, ¡oh hijos rebeldes!, dice el Señor, porque yo soy vuestro esposo, y escogeré de vosotros uno de cada ciudad y dos de cada familia, y os introduciré en Sión.
Pero diles a ésos: Yo juro, dice el Señor Dios, que no quiero la muerte del impío, sino que se convierta de su mal proceder y viva. Convertíos, convertíos de vuestros perversos caminos; ¿y por qué habéis de morir, oh vosotros los de la casa de Israel?
¡Oh Israel!, conviértete al Señor Dios tuyo; porque por tus maldades te has precipitado.
Y conoceréis que yo resido en medio de Israel, y que yo soy el Señor Dios vuestro, y que no hay otro sino yo; y jamás por jamás volverá a ser confundido el pueblo mío.
Y después de esto sucederá que derramaré yo mi espíritu divino sobre toda clase de hombres; y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos tendrán sueños misteriosos, y tendrán visiones vuestros jóvenes.
Porque en aquellos días y en aquel tiempo, cuando yo haya libertado a Judá, y a Jerusalén del cautiverio,
Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los habitantes de Jerusalén , el espíritu de gracia y de oración; y pondrán sus ojos en mí, a quien traspasaron, y llorarán al que han herido, como suele llorarse un hijo único; y harán duelo por él, como se suele hacer en la muerte de un primogénito.
Pues si vosotros, siendo malos como sois, sabéis dar buenas cosas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará el espíritu bueno a los que se lo piden?
Esto lo dijo por el Espíritu Santo, que habían de recibir los que creyesen en él; pues aún no se había comunicado el Espíritu Santo, porque Jesús todavía no estaba en su gloria.
antes bien empecé a predicar primeramente a los judíos que están en Damasco, y en Jerusalén , y por todo el país de Judea, y después a los gentiles, que hiciesen penitencia, y se convirtiesen a Dios, haciendo dignas obras de penitencia.
Haced, pues, penitencia, y convertíos, a fin de que se borren vuestros pecados,