Si el justo es castigado en la tierra por sus defectos, cuánto más lo será el impío y el pecador.
Oseas 4:9 - Biblia Torres Amat 1825 Por lo cual será tratado el sacerdote como el pueblo; y yo castigaré su mal proceder, y le daré la paga de sus designios. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y será el pueblo como el sacerdote; le castigaré por su conducta, y le pagaré conforme a sus obras. Biblia Nueva Traducción Viviente “Y lo que hacen los sacerdotes, el pueblo también lo hace”. Así que ahora castigaré tanto a los sacerdotes como al pueblo por sus perversas acciones. Biblia Católica (Latinoamericana) Trataré al sacerdote como al pueblo y le pediré cuentas por su conducta; a cada cual retribuiré según sus obras. La Biblia Textual 3a Edicion Pero la suerte del sacerdote será como la del pueblo, Visitaré° sobre él sus caminos, y le daré el pago de sus malos hechos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Será del sacerdote lo mismo que del pueblo: lo castigaré por su conducta y le pagaré según sus obras. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Tal será el pueblo como el sacerdote: y visitaré sobre él sus caminos, y le pagaré conforme a sus obras. |
Si el justo es castigado en la tierra por sus defectos, cuánto más lo será el impío y el pecador.
El hombre será colmado de bienes conforme fueren los frutos de su boca; y según las obras de sus manos será su galardón.
El impío será presa de sus mismas iniquidades, y quedará enredado en los lazos de su pecado.
Enteramente arruinada quedará la tierra, completamente devastada. Por cuanto el Señor así lo ha pronunciado.
Los profetas profetizaban mentiras, y los sacerdotes los aplaudían con palmoteos; y mi pueblo gustó de tales cosas: ¿Qué será, pues, de él al llegar su fin?
Pero los del linaje de Leví, que en la apostasía de los hijos de Israel se apartaron lejos de mí, y de mí se desviaron en pos de sus ídolos y pagaron la pena de su maldad,
pues le sirvieron delante de sus ídolos, y fueron ellos piedra de escándalo a la familia de Israel, para que cayera en la maldad. Por eso yo alcé mi mano contra ellos, dice el Señor Dios, y juré que llevarán la paga de su maldad.
Y dijo el Señor a Oseas: Ponle por nombre Jezrael; porque dentro de poco yo tomaré venganza de la casa real de Jehú por la sangre que ha derramado en la ciudad de Jezrael, y acabaré con el trono de la casa de Israel.
A medida de mi deseo los castigaré yo, las naciones se reunirán contra ellos, entonces serán castigados por su doble maldad.
Vendrá, pues, el Señor a vigilar la conducta de Judá, y a castigar a Jacob , y le dará el pago que merecen sus obras y sus vanos caprichos.
Jacob en el seno materno cogió por el calcañar a su hermano; y con su fortaleza luchó con el ángel.
Y porque no digan acaso en sus corazones que yo vuelvo a acordarme de todas sus maldades; actualmente están ellos rodeados de sus impiedades, las están cometiendo delante de mis ojos.
Ofrecerán hostias, inmolarán víctimas para el sacrificio, de las cuales comerán; mas el Señor no las aceptará, antes bien se acordará ahora de las maldades de ellos, y castigará sus pecados; entonces se acogerán a Egipto.
El colmo de su maldad fue allá en Galgal; allí les tomé yo aversión; yo los echaré de mi casa por causa de sus perversas obras; nunca más los amaré; todos sus príncipes son unos apóstatas.
Han pecado enormemente, como en los días aquellos pecaron los gabaonitas. Se acordará el Señor de la perversidad de ellos, y castigará sus maldades.
Pues las palabras mías y los decretos míos, comunicados a mis siervos los profetas, ¿por ventura no alcanzaron a vuestros padres? Ellos se convirtieron y dijeron: El Señor de los ejércitos ha hecho con nosotros aquello mismo que pensó hacer en vista de nuestras obras y de nuestros procederes.
Dejadlos; ellos son unos ciegos que guían a otros ciegos; y si un ciego se mete a guiar a otro ciego, ambos caen en el hoyo.