Otras tantas nacían también de otra, menudas y quemadas del viento abrasador,
Oseas 12:1 - Biblia Torres Amat 1825 Efraín se apacienta del viento, y confiando en Egipto respira el aire ardiente. Todo el día está aumentando sus falsedades y las causas de su perdición, se ha confederado con los asirios y ha llevado sus excelentes aceites a Egipto. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Efraín se apacienta de viento, y sigue al solano; mentira y destrucción aumenta continuamente; porque hicieron pacto con los asirios, y el aceite se lleva a Egipto. Biblia Nueva Traducción Viviente El pueblo de Israel se alimenta del viento; todo el día corre tras el viento del oriente. Amontonan mentiras y violencia; hacen una alianza con Asiria mientras mandan aceite de oliva a fin de comprar el apoyo de Egipto. Biblia Católica (Latinoamericana) Efraím me ha rodeado de mentira; la gente de Israel, de falsedad; sigue todavía a su Baal y se apega a sus divinidades. La Biblia Textual 3a Edicion Efraín se apacienta de viento, y sin cesar persigue al solano, Multiplica la mentira y la violencia, Han pactado un pacto con Asiria, Y llevan el aceite a Egipto. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Efraín me rodea de mentira, y de engaño la casa de Israel. Pero Judá está aún con Dios y es fiel al Santo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Efraín se apacienta de viento, y sigue al viento solano; mentira y destrucción aumenta continuamente; porque hicieron alianza con los asirios, y el aceite es llevado a Egipto. |
Otras tantas nacían también de otra, menudas y quemadas del viento abrasador,
Ful, rey de los asirios, vino entonces a esta tierra; y dio Manahem a Ful mil talentos de plata para que lo ayudase, y lo asegurase en el trono.
además de que erigió adoratorios en los lugares altos de las ciudades de Judá, e hizo idolatrar a los habitantes de Jerusalén , y prevaricar a Judá.
¿Es posible que un hombre sabio respondiese como tú, echando palabras al aire, y encendiendo el fuego de la ira en su pecho?
¡Oh, y cómo te has envilecido hasta lo sumo volviendo a tus malos pasos! Tú serás burlada de Egipto como lo fuiste ya de Asur.
Del viento se alimentarán todos tus pastores, y cautivos serán llevados todos tus amigos o favorecedores. Confuso quedarás entonces, ¡oh pueblo orgulloso!, y tú mismo te avergonzarás de todos tus vicios.
Y os arrojaré de mi presencia, como arrojé a todos vuestros hermanos de las diez tribus, a toda la raza de Efraín.
Alargamos nuestras manos a los egipcios y a los asirios, para saciarnos de pan.
Mira, ella es cierto que está plantada; ¿pero acaso prosperará? ¿No es verdad que luego que el viento abrasador la tocare se secará y quedará árida, a pesar de todos los canales que la fecundan?
Efraín me ha estrechado el paso con renegar de mí, y con sus fraudes la casa de Israel; Judá ha venido a dar testimonio a Dios de su amor, y sigue fielmente el camino de los santos.
No dejaré obrar el furor de mi indignación, no me resolveré a destruir a Efraín, porque yo soy Dios y no un hombre. El Santo ha habitado en medio de ti, y así no entraré en la ciudad para destruirla.
Si tú, ¡oh Israel!, te has entregado a la fornicación, o idolatría, al menos tú, ¡oh Judá!, no peques; y no queráis ir a Gálgala ni subáis a Betaven, para idolatrar, ni juréis diciendo: Vive el Señor.
A Israel le llevará atado a sus alas el viento de la indignación divina; y sus hijos quedarán cubiertos de ignominia por sus sacrificios.
Sintió Efraín su falta de fuerzas, y Judá sus cadenas; y Efraín recurrió al asirio, y Judá llamó a un rey en su defensa; mas éste no podrá daros la salud, ni podrá libraros de las cadenas.
Cuando yo quería curar los males de Israel, se descubrió la interior malicia de Efraín y la iniquidad de Samaria; porque entonces se ha dedicado a la mentira: y así entrará en su casa el ladrón a despojarlos, y por fuera lo hará el salteador.
Se ha vuelto Efraín como una imbécil paloma, falta de entendimiento. A los egipcios fueron a llamar, recurrieron a los asirios.
Sembrarán viento, y recogerán torbellinos para su ruina, no habrá allí espiga que se mantenga en pie, y sus granos no darán harina; y si la dieren, se la comerán los extraños.