y les dijo: ¿Por ventura podremos hallar un varón como éste, tan lleno del espíritu de Dios?
Números 27:18 - Biblia Torres Amat 1825 A esto le dijo el Señor: Toma a Josué, hijo de Nun, varón de espíritu, y pon tu mano sobre él, o imponle las manos. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y Jehová dijo a Moisés: Toma a Josué hijo de Nun, varón en el cual hay espíritu, y pondrás tu mano sobre él; Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor le respondió: —Toma a Josué, hijo de Nun, en quien está el Espíritu, y pon tus manos sobre él. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé respondió a Moisés: 'Llama a Josué, hijo de Nun, hombre en que está el Espíritu, y pon tu mano sobre él. La Biblia Textual 3a Edicion Y YHVH respondió a Moisés: Toma a Josué° ben Nun, varón en el cual hay espíritu, e impondrás tu mano sobre él, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh dijo a Moisés: 'Toma a Josué, hijo de Nun, hombre en quien está el espíritu, y pon tu mano sobre él. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová dijo a Moisés: Toma a Josué, hijo de Nun, varón en el cual está el Espíritu, y pondrás tu mano sobre él; |
y les dijo: ¿Por ventura podremos hallar un varón como éste, tan lleno del espíritu de Dios?
Y dijo Moisés a Josué: Escoge hombres de valor, y ve a pelear contra los amalecitas; mañana yo estaré en la cima del monte, teniendo la vara de Dios en mi mano.
He oído decir que tú tienes el espíritu de los dioses, y que se hallan en ti en grado superior la ciencia, e inteligencia, y la sabiduría.
y descenderé yo, y te hablaré, y yo tomaré de tu espíritu, y lo comunicaré a ellos para que sostengan contigo la carga del pueblo, y no te sea demasiado grave llevándola solo.
Estos son los nombres de los sujetos que envió Moisés a reconocer la tierra; y a Oseas, hijo de Nun, le dio el nombre de Josué.
Y puestas las manos sobre su cabeza, repitió todas las cosas que había mandado el Señor.
Porque éste a quien Dios ha enviado, habla las mismas palabras que Dios; pues Dios no le ha dado su Espíritu con medida.
Y después de haberse dispuesto con ayunos y oraciones, les impusieron las manos y los despidieron.
Y habiéndoles Pablo impuesto las manos, descendió sobre ellos el Espíritu Santo, y hablaban varias lenguas, y profetizaban.
por tanto, hermanos, nombrad de entre vosotros siete sujetos de buena fama, llenos del Espíritu Santo y de inteligencia, a los cuales encarguemos este ministerio.
Lo presentaron a los apóstoles, los cuales, haciendo oración, les impusieron las manos, o consagraron.
Ni es de maravillar ésta su indignación contra el pueblo; visto que aun contra mí, enojado el Señor por causa vuestra, dijo: Ni tampoco tú entrarás en esa tierra.
A Josué también lo previne en aquel tiempo diciendo: Bien han visto tus ojos lo que ha hecho el Señor Dios vuestro con estos dos reyes; pues así lo hará con todos los reinos a que has de pasar.
Da tus órdenes a Josué, y fortalécele y aliéntale, pues él es quien ha de conducir a ese pueblo y distribuirle la tierra que tú verás.
Dijo entonces el Señor a Moisés: Mira, ha llegado ya el día de tu muerte: llama a Josué, y presentaos los dos en el Tabernáculo del Testimonio, para que le dé mis órdenes. Fueron, pues, Moisés y Josué, y se presentaron en el Tabernáculo del Testimonio,
Al mismo tiempo dio el Señor sus órdenes a Josué, hijo de Nun, y le dijo: Ten buen ánimo, y cobra aliento, porque tú has de introducir a los hijos de Israel en la tierra que les prometí, y yo seré contigo.
Mas el Señor Dios tuyo, ¡oh Israel!, irá delante de ti: él deshará a tu vista todas esas naciones, y las conquistarás; y este Josué pasará delante de ti, como lo tiene dicho el Señor;
Y Josué, hijo de Nun, estaba lleno del espíritu de sabiduría: porque Moisés le había impuesto las manos. Y los hijos de Israel le prestaron obediencia, y ejecutaron lo que mandó el Señor a Moisés.
Medita estas cosas, y ocúpate enteramente en ellas, de manera que vea todo el mundo tu aprovechamiento.
No acostumbres beber agua sola, sino usa de un poco de vino por causa de tu estómago y de tus frecuentes enfermedades.
así como hemos obedecido a Moisés en todo, del mismo modo te obedeceremos también a ti; solamente deseamos que el Señor tu Dios sea contigo, como fue con Moisés.
Así pues, el espíritu del Señor se derramó sobre Jefté, quien recorriendo el país de Galaad y de Manasés, y pasando por Masfa de Galaad, y avanzando de allí hacia los amonitas,
De resultas quedó en paz el país por cuarenta años, y murió Otoniel, hijo de Cenez.
A lo que contestando uno de los criados, dijo: Hace poco vi a un hijo de Isaí, natural de Betlehem, muy diestro en tañer el arpa, mozo muy valiente y hábil para la guerra, prudente en el hablar, y de gallarda presencia, y muy favorecido del Señor.