Segunda vez concibió y parió un hijo, y dijo: Por cuanto el Señor entendió que yo era tenida en menos, me ha dado también este hijo; por eso le llamó Simeón.
Números 12:2 - Biblia Torres Amat 1825 y dijeron: Pues que, ¿por ventura el Señor ha hablado solamente por boca de Moisés?; ¿acaso no nos ha hablado igualmente a nosotros? Lo que oyendo el Señor, Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y dijeron: ¿Solamente por Moisés ha hablado Jehová? ¿No ha hablado también por nosotros? Y lo oyó Jehová. Biblia Nueva Traducción Viviente Dijeron: «¿Ha hablado el Señor solamente por medio de Moisés? ¿Acaso no ha hablado también a través de nosotros?». Y el Señor los oyó. Biblia Católica (Latinoamericana) ¿Acaso Yavé, decían, sólo hablará por medio de Moisés? ¿No habló también por nuestro intermedio? Y Yavé lo oyó. La Biblia Textual 3a Edicion Dijeron: ¿Acaso solamente a través de Moisés habla YHVH? ¿No ha hablado también por nosotros? Y YHVH lo oyó. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Decían: '¿Es que sólo con Moisés ha hablado Yahveh? ¿Acaso no ha hablado también con nosotros?'. Y Yahveh lo oyó. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijeron: ¿Solamente por Moisés ha hablado Jehová? ¿No ha hablado también por nosotros? Y lo oyó Jehová. |
Segunda vez concibió y parió un hijo, y dijo: Por cuanto el Señor entendió que yo era tenida en menos, me ha dado también este hijo; por eso le llamó Simeón.
Acabados los siete días del luto, David la hizo venir a palacio, y la tomó por esposa; y ella le dio después un hijo. Mas esto que hizo David fue sumamente desagradable a los ojos del Señor.
Mas el Señor Dios tuyo habrá sin duda oído todas las palabras de Rabsaces, enviado de su amo, el rey de los asirios, a ultrajar al Dios vivo, y a llenarlo de denuestos con las palabras que acaba de escuchar el Señor tu Dios; haz, pues oración por estos pocos israelitas que han quedado.
Enojado el Señor contra Moisés, dijo: Aarón tu hermano, hijo de Leví como tú, sé que habla bien; pues mira, éste mismo va a venir a tu encuentro, y al verte se llenará de gozo.
Y Aarón refirió todas las palabras que había dicho el Señor a Moisés; y éste hizo los milagros delante del pueblo.
Después de esto entraron Moisés y Aarón al faraón, y le dijeron; Esto dice el Señor Dios de Israel: Dejad ir a mi pueblo a fin de que me ofrezca un sacrificio solemne en el desierto.
Habiéndose, pues, presentado Moisés y Aarón al faraón, hicieron lo que Dios les había ordenado, y Aarón echó la vara en presencia del faraón y de sus servidores o cortesanos, la cual se convirtió en culebra.
Entre los soberbios hay continuas reyertas; mas los que obran siempre con consejo, se gobiernan prudentemente.
¿Acaso porque te saqué de tierra de Egipto, y te libré de la casa de la esclavitud, y envié delante de ti a Moisés, a Aarón y a María?
Entretanto se suscitó murmullo en el pueblo, como quejándose contra el Señor por el cansancio. Lo que habiendo oído el Señor se enojó; y encendido contra ellos fuego del Señor, devoró a los que estaban en la extremidad del campamento.
Pero él le respondió: ¿A qué fin tienes celos por amor de mí? ¡Ah! ¡Quién me diera que todo el pueblo profetizase y que el Señor concediese a todos su espíritu!
(pues era Moisés el hombre más manso de cuantos moraban sobre la tierra),
Y presentándose delante de Moisés y Aarón, dijeron: Básteos ya lo hecho hasta aquí; puesto que todo este pueblo es de santos, y en medio de ellos está el Señor, ¿por qué causa os ensalzáis tanto sobre el pueblo del Señor?
amándoos recíprocamente con ternura y caridad fraternal, procurando anticiparos unos a otros en las señales de honor y de deferencia.
Por lo que os exhorto a todos vosotros, en virtud del ministerio que por gracia se me ha dado, a que en vuestro saber o pensar, no os levantéis más alto de lo que debéis, sino que os contengáis dentro de los límites de la moderación, según la medida de fe que Dios ha repartido a cada cual.
no haciendo nada por tema, ni por vanagloria, sino que cada uno por humildad mire como superiores a los otros,
Humillaos, pues, bajo la mano poderosa de Dios, para que os exalte al tiempo de su visita o del juicio,