Mas los que dentro estaban, se acercaron a él y le adoraron, diciendo: Verdaderamente eres tú el Hijo de Dios.
Mateo 8:27 - Biblia Torres Amat 1825 De lo cual asombrados todos los que estaban allí, se decían: ¿Quién es éste que los vientos y el mar obedecen? Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y los hombres se maravillaron, diciendo: ¿Qué hombre es este, que aun los vientos y el mar le obedecen? Biblia Nueva Traducción Viviente Los discípulos quedaron asombrados y preguntaron: «¿Quién es este hombre? ¡Hasta el viento y las olas lo obedecen!». Biblia Católica (Latinoamericana) Grande fue el asombro; aquellos hombres decían: '¿Quién es éste, que hasta los vientos y el mar le obedecen?' La Biblia Textual 3a Edicion Y los hombres se maravillaron, diciendo: ¿Quién° es éste, que aun los vientos y el mar le obedecen? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los hombres quedaron admirados y se preguntaban: '¿Qué clase de hombre es éste, que hasta los vientos y la mar le obedecen?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los hombres se maravillaron, diciendo: ¿Qué clase de hombre es Éste, que aun los vientos y el mar le obedecen? |
Mas los que dentro estaban, se acercaron a él y le adoraron, diciendo: Verdaderamente eres tú el Hijo de Dios.
De manera que las gentes estaban asombradas viendo hablar a los mudos, andar a los cojos y ver a los ciegos; y glorificaban al Dios de Israel.
Al oír esto Jesús , mostró gran admiración, y dijo a los que le seguían: En verdad os digo que ni aun en medio de Israel he hallado fe tan grande.
Y les dijo Jesús : ¿De qué teméis, oh hombres de poca fe? Entonces, puesto en pie, mandó a los vientos y al mar que se apaciguaran, y siguió una gran calma.
Desembarcado en la otra ribera del lago, en el país de los gerasenos, fueron al encuentro de él, saliendo de los sepulcros dos endemoniados tan furiosos, que nadie osaba transitar por aquel camino.
y quedaron todos atónitos, tanto que se preguntaban unos a otros: ¿Qué es esto? ¿Qué nueva doctrina es ésta? El manda con imperio aun a los espíritus inmundos, y le obedecen.
Y se metió con ellos en la barca, y se echó al instante el viento, con lo cual quedaron mucho más asombrados.
y tanto más crecía su admiración, y decían: Todo lo ha hecho bien: él ha hecho oír a los sordos y hablar a los mudos.