Y he aquí que en aquel mismo día vinieron los criados de Isaac, a darle nuevas del pozo que habían excavado, diciendo: Hemos hallado agua.
Mateo 7:7 - Biblia Torres Amat 1825 Pedid, y se os dará; ¡buscad, y hallaréis!: llamad, y os abrirán. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Biblia Nueva Traducción Viviente »Sigue pidiendo y recibirás lo que pides; sigue buscando y encontrarás; sigue llamando, y la puerta se te abrirá. Biblia Católica (Latinoamericana) Pidan y se les dará; busquen y hallarán; llamen y se les abrirá la puerta. La Biblia Textual 3a Edicion Pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad a la puerta y se os abrirá. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pedid y os darán; buscad y encontraréis; llamad y os abrirán. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. |
Y he aquí que en aquel mismo día vinieron los criados de Isaac, a darle nuevas del pozo que habían excavado, diciendo: Hemos hallado agua.
Y se apareció el Señor por la noche en sueños a Salomón , diciendo: Pide lo que quieres que yo te otorgue.
Atendiste, ¡oh Señor!, al deseo de los pobres; prestaste benignos oídos a la rectitud de su corazón,
Por lo mismo, orgulloso el pecador ha exasperado al Señor, y no le buscará según el exceso de su arrogancia.
Contigo ha hablado mi corazón; en busca de ti han andado mis ojos. ¡Oh, Señor! tu cara es la que yo busco.
Acudí solícitamente al Señor, y me oyó, y me sacó de todas mis tribulaciones.
e invócame en el día de la tribulación: Yo te libraré, y tú me honrarás con tus alabanzas.
Que vean esto los pobres, y se consuelen. Buscad, pues, a Dios, y revivirá vuestro espíritu,
Que se regocijen, y se alegren en ti todos los que te buscan; y digan sin cesar los que aman a su salvador : Engrandecido sea el Señor.
Siendo tú, Señor, como eres, suave, y benigno, y de gran clemencia para con todos los que te invocan,
Me encontraron las patrullas que rondan por la ciudad, y les dije: ¿No habéis visto al amado de mi alma?
Y antes te dará el Señor pan de dolor y agua de tribulación; pero después hará que jamás se aleje de ti tu maestro, y tus ojos estarán viendo siempre a tu doctor.
Invócame, y yo te oiré benigno, y te declararé cosas grandes y ciertas que tú ignoras.
Os digo más: Que si dos de vosotros se unieren entre sí sobre la tierra para pedir algo, sea lo que fuere, les será otorgado por mi Padre que está en los cielos.
Así que buscad primero el reino de Dios y su justicia, y todas las demás cosas se os darán por añadidura.
Pues si vosotros siendo malos sabéis dar buenas cosas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará cosas buenas a los que se las pidan?
Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.
Por tanto, os aseguro, que todas cuantas cosas pidiereis en la oración, tened fe de conseguirlas, y se os concederán.
Y después que el padre de familia hubiere entrado y cerrado la puerta, empezaréis, estando fuera, a llamar a la puerta diciendo: ¡Señor, Señor, ábrenos!, y él os responderá: No os conozco, ni sé de dónde sois.
Les propuso también esta parábola, para hacer ver que conviene orar perseverantemente y no desfallecer,
No me elegisteis vosotros a mí, si no que yo soy el que os he elegido, y destinado para que vayáis por todo el mundo y hagáis fruto, y vuestro fruto sea duradero, a fin de que cualquier cosa que pidiereis al Padre en mi nombre, os la conceda.
Al contrario, si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pediréis lo que quisiereis, y se os otorgará.
Le dijo Jesús en respuesta: Si tú conocieras el don de Dios, y quién es el que te dijo: Dame de beber, puede ser que tú le hubieras pedido a él, y él te hubiera dado agua viva.
dando la vida eterna a los que, por medio de la perseverancia en las buenas obras, aspiran a la gloria, al honor y a la inmortalidad,
Por la fe, avisado Noé de Dios sobre cosas que aún no se veían, con santo temor fue construyendo el arca para salvación de su familia y construyéndola condenó al mundo y fue instituido heredero de la justicia, que se adquiere por la fe.
Confesad, pues, vuestros pecados uno a otro, y orad los unos por los otros para que seáis salvos; porque mucho vale la oración perseverante del justo.
En suma, éste es su mandamiento, que creamos en el Nombre de su Hijo Jesucristo, y nos amemos mutuamente, conforme nos tiene mandado.